Tegucigalpa, Honduras. Un informe de la Secretaría de Relaciones Exteriores y Cooperación Internacional detalla que los hondureños deportados en lo que va del 2018 han incrementado en 14.11 por ciento respecto a los primeros dos meses de 2017.
El Observatorio Consular y Migratorio de Honduras (CONMIGHO) informó que en los primeros dos meses de 2018 han sido deportados 9,792 connacionales. En ese sentido, un aumento de 1,382 frente a los 8,410 retornados en el mismo periodo del 2017.
El informe explica que en febrero se registraron 5,537 hondureños deportados. Cifra que supera aún registros del 2015 (5,362).
Luego Honduras experimentará el mayor repunte de la migración tras un éxodo de menores; los cuales cruzaron la frontera estadounidense sin la compañía de un adulto.
En ese orden, en el presente año las autoridades migratorias de Estados Unidos han deportado a 3, 548 hondureños. De los cuales, hay 23 menores de edad entre ellos, añade el informe.
De igual manera, las autoridades aztecas han repatriado a 6,225 hondureños. Entre ellos, 1,118 menores de edad. Entre tanto, desde países de Centroamérica, 18 hondureños han regresado en calidad de deportados. Nueve de ellos infantes.
Además, un menor más ha sido repatriado desde Europa, según CONMIGHO. Los datos oficiales muestran cifras de deportaciones en primeros meses similares. Incluso, superadas a las registradas en 2015. Un año después de declararse una crisis humanitaria por el éxodo de menores.
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Años anteriores
En un cuadro comparativo, CONMIGHO señala que en febrero de 2015 fueron deportados 5,362 hondureños. Mientras que en el mismo mes de 2018 la cifra asciende a cinco 5,537.
Si la tendencia al alza continúa, el año podría cerrar con más de 70 mil deportados. Esto, tanto por la vía aérea como terrestre. En cuanto al país de origen de la deportación se mantiene la tendencia que coloca a México como el que más hondureños deporta.
Los datos antes mencionados revelan que incluso la nación azteca duplica las expulsiones frente a su vecino Estados Unidos. Las causas de emigración de los hondureños siguen siendo la falta de empleo, huir de la violencia y la búsqueda de la reunificación familiar.
