Redacción. En el marco de la celebración del Día del Estudiante, el rector de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Odir Fernández, reveló una dura realidad sobre el desempleo que enfrentan los egresados del alma mater.
Odir Fernández detalló que menos de la mitad logra acceder a un empleo formal, y apenas un 20 % se inserta directamente en el mercado laboral en su área profesional.
“Hoy celebramos con alegría el natalicio del presbítero José Trinidad Reyes, nuestro fundador, y reconocemos a los estudiantes por su excelencia académica. Pero no podemos ignorar una realidad preocupante: el país no les está ofreciendo oportunidades laborales dignas”, manifestó el rector para Hoy Mismo.
Según Fernández, cada año se gradúan alrededor de 10,000 profesionales de la UNAH, pero la falta de plazas y de políticas efectivas de empleo limita gravemente su inserción laboral.
En particular, mencionó que jóvenes médicos y otros profesionales de la salud se ven obligados a emigrar o dedicarse a actividades informales por la falta de plazas en el país.
“Tenemos médicos recién graduados que terminan haciendo trabajos ajenos a su formación, y eso debería generar una alta preocupación nacional”, lamentó.
Además de la baja empleabilidad, el rector denunció la existencia del superempleo, una situación en la que los egresados trabajan en áreas que no corresponden a su preparación académica.
“Eso significa que incluso quienes logran emplearse, lo hacen en condiciones que no aprovechan su formación profesional, lo cual representa una pérdida para el país”, señaló.
Generación de empleo
Fernández hizo un llamado urgente al Estado para que asuma un rol más activo en la generación de oportunidades.
“Nosotros cumplimos con nuestra parte: formamos profesionales con excelencia. Pero el Estado debe sentarse con la empresa privada, ceder posturas y construir juntos políticas que permitan aprovechar ese talento hondureño”, subrayó.
El rector concluyó con un mensaje a los estudiantes: “La formación que reciben en esta universidad es valiosa. Pero urge que el país, sus instituciones y sus líderes, actúen con responsabilidad para que el esfuerzo de estos jóvenes no quede en el olvido”.
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La denuncia de Fernández resalta una problemática estructural que afecta a miles de jóvenes hondureños: una educación de calidad sin un puente efectivo hacia un futuro digno.