Real Madrid no pudo ante el Eibar en la Liga de España y terminó empatando por 1-1 en su estadio Santiago Bernabéu, resultado que hizo que cediera la punta de la tabla en la jornada siete.
El Campeón de Europa no tiene armas para intimidar a un grupo de veteranos en la supervivencia. Y se nota.
El partido ya había comenzado con un mal augurio para los merengues cuando James se lesionó mientras calentaba y Zidane tuvo que enviar a Mateo Kovacic en su lugar. Del desconcierto por la inesperada baja de James, pasó a la desesperanza.
Eibar llevó el partido a su territorio y por una tarde, el césped perfecto del Santiago Bernabéu se convirtió en un campo de tierra, que para un jugador de élite bien podría parecer de arenas movedizas.