Redacción. Médicos y autoridades de salud en Honduras, ante la alerta epidemiológica por sarampión que ya afecta a varios países de la región, comenzaron a intensificar la vacunación para evitar casos en el territorio nacional.
Aunque hasta ahora el país no ha reportado contagios, el repunte de casos en México, Belice, Estados Unidos y naciones sudamericanas ha encendido las alarmas.

El doctor Román Morán, especialista en salud pública, explicó que Honduras se encuentra en una posición geográfica vulnerable, al ser un punto de tránsito frecuente para migrantes provenientes de América del Sur hacia el norte.
“Estas personas conviven con nuestra población durante su paso, lo que representa un riesgo de contagio si alguien porta el virus”, advirtió en entrevista con medios nacionales.
Sarampión
El sarampión, una enfermedad altamente contagiosa, afecta sobre todo a los niños y puede ser mortal si no se detecta y atiende a tiempo.
En Honduras, la vacuna contra esta enfermedad forma parte del esquema del Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI), y debe aplicarse a los 12 meses de edad y nuevamente a los 18 meses.

“Es fundamental que los padres revisen los carnés de vacunación de sus hijos y se aseguren de que estén al día”, insistió el Dr. Morán.
Los primeros síntomas de sarampión suelen confundirse con otras enfermedades: fiebre, tos, y malestar general. Sin embargo, el doctor alertó sobre señales más específicas como unas manchas blancas en la boca (conocidas como manchas de Koplik) y, posteriormente, un salpullido que se extiende por todo el cuerpo.

“Desde la fiebre ya deben llevar al niño al médico. No esperen a que aparezca el brote en la piel”, aconsejó Morán, al tiempo que reiteró que automedicarse puede empeorar la situación.
Le puede interesar:Honduras enfrenta alerta por sarampión, muertes por dengue y casos de tos ferina
La Secretaría de Salud mantiene activa la vigilancia epidemiológica y hace un llamado urgente a la población para que colabore revisando carnés de vacunas, especialmente en menores de edad. Prevenir hoy puede salvar vidas mañana.