YORO. Dos marinos fueron asesinados en las últimas horas dentro de un carwash en el Barrio San José 2 de El Progreso, zona norte de Honduras.
Los fallecidos fueron identificados por las autoridades como: Raúl Díaz y Wilmer Geovany Valle Rosales de 36 años de edad.
Información recabada hasta ahora, indica que los dos hombres se encontraban en un negocio de carros reparando algunas cosas y el cual pertenece a la suegra de uno de ellos.
Raúl Díaz junto a su esposa pasó por la casa de Wilmer Geovany y se fueron al local. Se supo que los hombres estaban bajando materiales y herramientas a eso de las 10:00 am.
Cuando fueron sorprendidos por dos individuos que llegaron a pie al lugar. Pero que cuadras antes se bajaron de un turismo verde, aparentemente Nissan Sentra.
Al llegar, los sujetos tomaron a una mujer con quien forcejearon, pues todo indica que andaba dinero en dólares, pero no le encontraron nada.
Al parecer, los hombres también le pidieron el dinero a uno de las víctimas. Pero según la familia quien andaban 1,200 dólares en su billetera era Wilmer Geovany Valle.
Los delincuentes le dispararon a los dos hombres en repetidas ocasiones. El cuerpo de Wilmer Geovany quedó dentro de la propiedad, y a Raúl Díaz lo trasladaron al hospital de El Progreso, pero murió allí.
Familiares de Raúl Díaz, manifestaron que él se iba el lunes 13 de febrero a estudiar a
Estados Unidos. Mientras que Wilmer Geovany Valle tenía 18 años de estar embarcado y venía por temporadas a Honduras a pasar con sus seres queridos.
Uno de los mineros asesinados en la zona norte de Honduras.
Investigan verdadero móvil de crimen de dos marinos
Los familiares dijeron que creen que todo se trató de un robo, pues los delincuentes
buscaban dinero y no sabían quién lo tenía.
Los agentes de Inspecciones Oculares de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) levantaron 22 casquillos calibre 9 milímetros de la escena.
Además, a las víctima les encontraron sus documentos personales y a uno de ellos los 1,200 dólares que andaba en su cartera. Los cuerpos fueron llevados a la morgue de San Pedro Sula
