Redacción. Un terremoto de magnitud 7,7 sacudió Birmania este viernes, dejando al menos 200 muertos y 730 heridos, según informó la junta militar birmana. El sismo, que provocó el colapso de numerosos edificios e infraestructuras en el ya empobrecido país, ha generado caos y desesperación en las zonas afectadas, donde los esfuerzos de rescate se ven obstaculizados por la magnitud de los daños y la falta de recursos.
“Todos los edificios están completamente destruidos… ha sido un caos”, relató a EFE una mujer de 40 años desde Naipyidó, la capital del país. «Fue espantoso. Me quedé atrapada en casa unos minutos. Si las paredes se hubieran derrumbado, habría muerto», añadió a través de Facebook.
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El impacto del sismo se sintió en países vecinos como Tailandia, donde la primera ministra, Paetongtarn Shinawatra, decretó estado de emergencia en la capital tras el derrumbe de un edificio en construcción que dejó al menos tres muertos y más de 80 personas atrapadas.
Alerta
El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) registró el sismo a las 12:50 hora local (6:20 GMT) y emitió una «alerta naranja», la segunda más grave tras la roja, debido al alto número de víctimas y pérdidas económicas previstas.
El epicentro se localizó a 17 kilómetros de Mandalay, la segunda ciudad más grande de Birmania, con 1,2 millones de habitantes y situada a 270 kilómetros al norte de la capital. La urbe ha sido una de las más afectadas.
«Todo el mundo está en las calles. He visto muchos edificios dañados, hay incendios en varias zonas y los equipos de rescate no dan abasto», dijo un residente de Mandalay.
Los equipos de emergencia trabajan sin las herramientas necesarias para remover escombros, limitándose a trasladar heridos y recuperar cuerpos. “Uno de los fallecidos murió dentro de su coche cuando un edificio le cayó encima”, explicó un rescatista.
Hasta el momento, el Comité de Gestión de Desastres de Birmania no ha ofrecido un balance oficial de daños, pero fuentes humanitarias reportan edificios y puentes colapsados, además de un monasterio donde 20 niños han quedado atrapados.
Puentes derrumbados
Desde Rangún, la ciudad más grande del país, la coordinadora de la Federación Internacional de la Cruz Roja (FICR), Marie Manrique, alertó sobre el colapso de un puente clave para la comunicación y el posible daño en una presa. “No solo hay edificios con grietas o fisuras, sino estructuras enteras derrumbadas, incluyendo carreteras y puentes”, advirtió.
El régimen militar, que gobierna Birmania desde el golpe de Estado de 2021, declaró el estado de emergencia en seis regiones: Sagaing, Mandalay, Magway, Shan, Naipyidó y Bago.
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