AFP. Más de 1,100 personas, 700 en suelo israelí y más de 400 en Gaza, murieron en dos días de guerra entre Israel y el movimiento islamista palestino Hamás, que capturó a un centenar de rehenes en una sorpresiva ofensiva contra el Estado hebreo.
«El enemigo está aún en el terreno», indicó el domingo el ejército israelí.
El primer ministro Benjamin Netanyahu pidió a los israelíes prepararse para una guerra «larga y difícil» y el ejército anunció la próxima evacuación de todos los habitantes de zonas cercanas a la Franja de Gaza.
La ofensiva desencadenada el sábado por Hamás, que gobierna Gaza, dejó de momento en Israel más de 700 muertos y 2,150 heridos, 200 de ellos en «estado crítico», según el balance actualizado por las Fuerzas de Defensa de Israel.
Los bombardeos lanzados como réplica por Israel contra Gaza ocasionaron 413 muertos, entre ellos 78 niños y 41 mujeres, así como 2,300 heridos, indicó el ministerio de Salud de ese enclave palestino.
El gobierno israelí indicó además que Hamás capturó a «más de 100» personas, tomándolas como «prisioneras».
«Matar a cada terrorista»
Israel desplegó decenas de miles de militares con la misión de «liberar rehenes» y «matar a cada terrorista presente» en su territorio, afirmó el portavoz del ejército, Daniel Hagari.
Muchos israelíes en busca de parientes desaparecidos aseguran haberlos reconocido en videos que circulan en redes sociales.
Entre las personas capturadas hay varios ciudadanos estadounidenses y alemanes, muchos con doble nacionalidad israelí.
En la noche del domingo, un portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos dijo que «varios» ciudadanos estadounidenses murieron en el ataque de Hamás, sin dar más detalles.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Canadá informó sobre «la muerte de un canadiense y la desaparición de otros dos».
También hay «tres brasileños desaparecidos» y uno «hospitalizado», que participaban en un festival de música, indicó a la AFP la cancillería en Brasilia.
En la ofensiva de Hamás también perecieron diez nepalíes, indicó la embajada en Tel Aviv del país himalayo.
Tensión internacional
El Consejo de Seguridad de la ONU analizó el domingo la crisis. Asimismo, varios denunciaron a Hamás por su ataque y Estados Unidos lamentó la falta de unanimidad.
Diplomáticos dijeron que el Consejo no consideró hacer una declaración conjunta, y mucho menos una resolución vinculante. Otros miembros encabezados por Rusia esperaban un enfoque más amplio que la condena a Hamás.
El ataque de Hamás fue condenado por Estados Unidos y numerosos países europeos y latinoamericanos.
Washington comenzó el domingo a enviar ayuda militar adicional a Israel y cercó su fuerza naval, informó el secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin.
Después del anuncio, Hamás equiparó en un comunicado la ayuda militar estadounidense a una «agresión» contra los palestinos.
«El anuncio de EEUU de que proporcionará un portaaviones para apoyar la ocupación implica una participación real en la agresión contra nuestro pueblo», dijo.
El presidente iraní, Ebrahim Raisi, declaró que la República Islámica «apoya la legítima defensa de la nación palestina».
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, ofreció sus buenos oficios para poner fin al conflicto.
Y finalmente, Francia, a través del Ministerio Exteriores, declaró que «está activa para evitar que el conflicto degenere, con una conflagración en Cisjordania, en el Líbano o en la región».