Redacción. El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, fue designado como director interino de la Agencia para el Desarrollo Internacional (Usaid), una agencia de ayuda independiente hasta ahora.
En una rueda de prensa durante su visita oficial a El Salvador, Rubio expresó que la dependencia encargada de la ayuda humanitaria estadounidense enfrenta un problema de «insubordinación» y agregó que esto ha dificultado una revisión efectiva de sus proyectos y operaciones.
Rubio denunció que Usaid ha tenido un historial de no alinear sus programas con los intereses de la política exterior estadounidense. «Cada dólar que gastamos, cada programa que financiamos, debe estar alineado con el interés nacional de Estados Unidos«.
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El jefe de la diplomacia estadounidense de igual modo criticó la falta de coherencia en los proyectos de la agencia. Afirmó que, a lo largo de misiones en todo el mundo, ha encontrado casos donde Usaid ha financiado programas contrarios a los objetivos de la estrategia nacional.
Clausura
El anuncio de Rubio llegó horas después de que el magnate Elon Musk asegurara que el presidente Donald Trump había decidido desmantelar la agencia. Musk dijo que Trump había acordado «cerrar» Usaid, lo que generó gran expectación sobre el futuro de la entidad.
Además, la página web y las cuentas en redes sociales de la agencia dejó de funcionar este fin de semana.
Este lunes, las oficinas de la Usaid en Washington las precintaron y se ordenó a los empleados quedarse en casa, mientras la agencia queda temporalmente bajo el control del Departamento de Estado. Sin embargo, Rubio aclaró que las funciones esenciales de la Usaid continuarán, aunque evitó comentar sobre su futuro.
La Usaid, una entidad independiente creada por una ley del Congreso, tiene un presupuesto de 42,800 millones de dólares destinados a ayuda humanitaria y asistencia al desarrollo en todo el mundo.
