Internacional. Una de las icónicas mansiones del Upper East Side de Nueva York, que alguna vez perteneció al multimillonario Jeffrey Epstein, fue vandalizada con consignas que mencionaban las palabras «Negar, defender, deponer», escritas en su fachada.
Este acto, que rápidamente captó la atención pública, parece estar relacionado con el polémico caso de Luigi Mangione, un joven (26 años) acusado del asesinato del director ejecutivo de UnitedHealthcare, Brian Thompson.
Junto a estas palabras -que se asocian con Mangione- también se leyeron otras consignas como «Liberen a Luigi» y «Temen al pueblo», en lo que aparenta ser una muestra de apoyo por parte de sus seguidores. Los mensajes los eliminaron horas después por trabajadores que se encontraban en el lugar.
La mansión tiene un pasado oscuro. Jeffrey Epstein, quien se mudó a la propiedad en 1995, utilizaba esta residencia como uno de los epicentros de sus crímenes de abuso sexual y tráfico de menores, al tiempo que recibía a influyentes figuras del ámbito político, financiero y social.
Tras el arresto de Epstein en 2019 por cargos de tráfico sexual, y su posterior suicidio en prisión, la mansión fue puesta a la venta. En 2021, el exejecutivo de Goldman Sachs, Michael Daffey, adquirió la propiedad por 51 millones de dólares.
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La conexión de Luigi Mangione y Jeffrey Epstein
Aunque no existe una conexión aparente entre Luigi Mangione y Jeffrey Epstein, algunos medios internacionales especulan que el acto vandálico fue un intento de los seguidores de Mangione por atraer la atención hacia su caso judicial.
Las palabras «Negar, defender, deponer» no son nuevas en la narrativa del caso Mangione. Estas mismas palabras se encontraron inscritas en los casquillos de bala que estaban cerca del cuerpo de Brian Thompson, quien fue asesinado frente a un hotel de Nueva York.
Curiosamente, la frases son similares al título del libro «Delay, Deny, Defend» de Jay M. Feiman, que expone prácticas deshonestas de compañías de seguros al evitar pagar reclamaciones.
Un oscuro legado
La mansión en mención no sólo se le conoce por su valor exorbitante, sino también por el tenebroso historial que la rodea. Su conexión con los crímenes de Epstein la convirtió en un símbolo de poder, corrupción y abuso. Ahora, con los mensajes de apoyo a Mangione, el inmueble se ve envuelto nuevamente en controversia.
