Redacción. Una maestra migrante hondureña abrió recientemente una escuela para hijos de ilegales solicitantes de asilo en la frontera sur de México.
Autoridades han dado a conocer que el flujo migratorio de hondureños rumbo a EEUU ha aumentado de manera significativa, puesto que se registran cifras récord de solicitantes de refugio.
En ese contexto adverso, Mayuri Ramírez decidió abrir una escuela para que los menores que cruzan el país azteca no se atrasen en sus estudios. A la vez evita que se expongan a otros peligros en la frontera.
“Estamos con un grupo de niños, con una escuelita de la COMAR (Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados), que son los niños que traen las madres de las personas que asean el mercado”, explicó la docente.
Recientemente se alcanzó el récord de casi 75 mil solicitudes de asilo recibidas en el primer semestre del año la COMAR del Gobierno de México, que espera cerrar el año con una cifra récord de más 150 mil de peticiones.
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Según un informe de la COMAR, más de la mitad de las peticiones ocurren en Tapachula, donde los migrantes hacen filas bajo el sol o duermen en las calles ante la saturación de los servicios.
«Queremos cuidarlos»
«Hemos decidido abrir la escuelita para que ellos estén en un ambiente agradable, para que no estén debajo del sol», indicó la maestra.
«Queremos que se mantengan en un solo lugar para mayor seguridad. Porque aquí hay bastante gente que son solicitantes de asilo y la escuela es para todos los niños que quieran venir”, añadió la hondureña.
El Instituto Nacional de Migración (INM) reportó en 2022 el “rescate” de casi 747 mil migrantes en situación irregular, de los que más de 110 mil eran menores de edad, entre ellos más de 14 mil no acompañados.
El aula está en un local al interior del mercado “Laureles”, donde se concentra el mayor flujo de solicitantes de asilo en Tapachula.