Redacción. Una mujer de 66 años, residente en la colonia Pinto, en Las Flores, Lempira, denunció ante las autoridades a su propio hijo tras sufrir durante ocho años maltrato físico, verbal y emocional.
La víctima, quien presenta una discapacidad motriz debido a una lesión en la cadera, interpuso la denuncia formal luego de soportar amenazas e insultos constantes que, según relató, se intensificaron en los últimos dos años.
“Con todo el dolor del mundo, no aguantó más”, aseguraron vecinos a medios locales. Fue esa presión y el deterioro de su salud lo que la llevó a revelar la situación que vivía en su hogar.

La última agresión se registró la mañana de este martes, cuando el hombre, de 34 años, llegó en estado de ebriedad a casa de su madre y volvió a amenazarla. Fue entonces cuando las autoridades intervinieron de inmediato.
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El sospechoso, un agricultor originario de la misma zona, fue detenido por agentes de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) y trasladado al Ministerio Público para enfrentar cargos por maltrato familiar.
“La víctima confesó que su hijo tenía al menos ocho años de estarla agrediendo”, informó la Policía Nacional mediante un comunicado.
¿Cómo se castiga el maltrato familiar en Honduras?
La violencia intrafamiliar se sanciona con medidas como restricción de acercamiento, separación del agresor y prisión de hasta dos años.

Si la víctima es una persona vulnerable, como en este caso, la pena puede agravarse. A pesar del marco legal, organizaciones civiles advierten que muchas veces estas sanciones no disuaden a los agresores y que la reincidencia es frecuente.