Redacción. Luis Redondo, presidente del Congreso Nacional, amenazó con destituir a los diputados de oposición tras no concretarse la votación y aprobación de la Ley de Justicia Tributaria.
En la sesión del miércoles, Redondo intentó aprovechar la baja asistencia de diputados opositores para aprobar la ley, pero estos regresaron a sus curules y protestaron contra la discusión del dictamen.
Como resultado, el titular del Congreso suspendió la discusión y emitió varias aseveraciones, entre ellas una amenaza contra los congresistas.
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«No acepto cuando se dice que se van algunos diputados porque hay algo hablado. Aquí regresaron, otros andan de viaje y otras cosas», indicó.
«Sacaron las tarjetas con la intención de romper el quórum. Quiero leer la Constitución, que yo no dudo en aplicar. En el artículo 19, los diputados que, con su inasistencia injustificada a las sesiones, dieron motivos para que no se forme el quórum o este se desintegre, serán expulsados del Congreso y perderán por un periodo de 10 años el derecho de optar a cargos públicos», añadió.
Finalizó señalando que «no me va a temblar la mano para poder aplicar esto».
Costumbre
Lissi Cano, diputada por el Partido Nacional, aseguró que las actitudes amenazantes de Luis Redondo se han vuelto una costumbre en el Poder Legislativo.
«Se ha vuelto una constante en estos improvisados e inoperantes que nos gobiernan. No sólo es en el Congreso Nacional, sino también en los otros poderes del Estado, donde se utiliza la amenaza», manifestó.
«Es una práctica constante de quienes nos malgobiernan; es una carta utilizada en todos aquellos gobiernos de corte socialista. Lo que hacen es encontrar a quienes están señalando lo que están haciendo mal y, entonces, promueven este tipo de acciones», prosigió.
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Cano sostuvo que, ante las actitudes de Redondo y del partido de gobierno (Libre), para hacerles frente y evitar que se aprueben temas en contra de los hondureños, deben realizar protestas, aunque muchos ciudadanos las califican de circo.
Cuestionó además la incapacidad de Redondo para generar consensos y acuerdos en el país. «En estos tres años y medio hemos visto un Congreso que el pueblo no se merece, donde priman los espectáculos circenses. Se lo digo con mucha pena, porque se le ha quedado a deber al pueblo», cerró.