REDACCIÓN. Un trágico accidente cobró la vida de Axel Villeda, un niño de 10 años, quien fue atropellado por un bus tipo «rapidito» mientras iba a comprar un refresco para cenar.
El fatal hecho ocurrió el lunes, por la noche, cuando el menor intentaba cruzar la calle y fue embestido por un «rapidito» en la localidad de Cofradía, Cortés.
Según familiares y testigos, a Axel lo enviaron a comprar un refresco. «Es hijo de un tío de nosotros, lo mandaron a comprar un fresco para cenar, y supuestamente iba para la casa. Ese rapidito lo mató, salió y ya no regresó», comentó una prima del niño en redes sociales, afectada por la pérdida.
El conductor del bus, que circulaba a alta velocidad, no detuvo la marcha tras atropellar al menor, dejando el cuerpo del niño tendido en medio de la calle. Este trágico suceso ha generado una ola de indignación tanto en la comunidad de Cofradía como en toda Honduras. A través de redes sociales, los parientes y allegados de Axel han pedido justicia, exigiendo que el conductor del «rapidito» reciba su castigo por su irresponsabilidad al manejar.
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La indignación también ha alcanzado a otros ciudadanos, quienes han criticado la falta de control sobre los conductores. «Los chóferes de buses son unos abusivos, se pasan, y esto es en todo Honduras. Ya es tiempo de que pongan mano dura. Cualquiera maneja un bus, cualquiera te invade y te quitan la calle», expresó un usuario en redes sociales.
Al conductor del bus lo requirieron por las autoridades para una investigación. Mientras, la familia de Axel y la comunidad claman por que este caso no quede impune. Piden que se tomen medidas más estrictas para evitar más tragedias en las calles del país.
