WASHINGTON. – La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos revocó su autorización de usar hidroxicloroquina, medicamentos contra el paludismo, para tratar la COVID-19 en medio de pruebas crecientes de que no funcionan y podrían causar efectos secundarios mortales.
La agencia dijo el lunes que es poco probable que los medicamentos hidroxicloroquina y cloroquina sean eficaces en el tratamiento del coronavirus. Citando informes de complicaciones cardíacas, la FDA dijo que los medicamentos representan un mayor riesgo para los pacientes que cualquier beneficio potencial.
«Ya no es razonable creer que las fórmulas orales HCQ (hidroxicloroquina) y CQ (cloroquina) sean efectivas en el tratamiento de la covid-19», escribió Denise Hinton, científica principal de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) en una carta.
Los medicamentos, recetados para el lupus y la artritis reumatoide, pueden causar problemas del ritmo cardíaco. Tambien la presión arterial gravemente baja y daño muscular o nervioso.
Trump impulsó agresivamente la hidroxicloroquina
La medida significa que los envíos de los medicamentos obtenidos por el gobierno federal ya no se distribuirán a las autoridades sanitarias estatales y locales. Los medicamentos todavía están disponibles para usos alternativos, por lo que los médicos estadounidenses todavía podrían prescribirlos para COVID-19, una práctica conocida como prescripción fuera de etiqueta.
El jueves, un panel de expertos de los Institutos Nacionales de Salud revisó sus directrices. Recomendó específicamente el uso de la droga excepto en estudios formales.
Como se sabe, Donald Trump empujó agresivamente hidroxicloroquina a partir de las primeras semanas del brote. Asimismo, sorprendió a los profesionales médicos cuando reveló que tomó el medicamento preventivamente contra la infección.
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