26.6 C
San Pedro Sula
sábado, abril 20, 2024

«La Barbie» era espía de la DEA y ayudó a localizar al «Chapo»

Debes leer

Redacción.– El presunto narcotraficante Édgar Valdez Villarreal, conocido como «La Barbie», declaró ante una corte en Estados Unidos que tenía pensado entregarse a las autoridades antes de 2010, pero la Administración de Control de Drogas (DEA) le solicitó mantenerse dentro del Cártel de los Beltrán Leyva, posición que le permitió brindar información para que las fuerzas federales lograran detener en una ocasión a Joaquín «El Chapo» Guzmán, así como la ubicación de Arturo Beltrán Leyva, quien terminó abatido en Cuernavaca, Morelos.

Así, Valdez Villarreal se movía como narcotraficante y de forma paralela era un informante, proporcionando información de los altos líderes del cártel de los Beltrán Leyva y sobre las rutas de trasiego de cocaína procedente de Colombia.

«Quiero decir, no es excusa lo que estoy diciendo… sólo estoy diciendo lo que el gobierno decía, que yo me iba a entregar, y hay una carta del gobierno diciendo: ´Detente y sigue haciendo lo que tengas que hacer´», dijo Valdez ante el juez que, más tarde, le impuso una sentencia de 49 años de prisión.

Era un «Topo» 

De acuerdo con la transcripción de la sentencia de la Corte del Distrito Norte de Atlanta, Georgia, emitida por el juez William S. Duffey, en 2018 el narcotraficante Valdez Villarreal reveló que desde 2004 servía como informante de las agencias de inteligencia norteamericanas.

Durante su proceso ante la justicia de EEUU, «La Barbie» intentó justificar que aunque había cometido crímenes serios, como narcotráfico y lavado de dinero, eso fue en parte por pedido de las autoridades de ese mismo país.

«Acerca de lo que estaba escuchando, no pasé por encima de ellos solamente para entregarme, era de mi interés entregarme, y el gobierno tiene prueba de ello, porque enviamos una carta demostrándolo, y ellos me dijeron que esperara. Y tenemos prueba de ello», argumentó el capo.

Valdez Villarreal aseguró que las autoridades de Estados Unidos querían mandar una señal a los capos mexicanos de que estaban dispuestos a cooperar para poner fin a la violencia y la guerra entre grupos criminales.

Aseguró que a través de su historia, trataban de «enviar un mensaje a la gente en los cárteles mexicanos y todo eso, quiero decir, es cierto, y también pueden enviar el mensaje de que el gobierno quiere cooperar, para que puedan detener todo esto, las drogas y los asesinatos allá en México».

La Barbie DEA Chapo
Las confesiones del presunto narcotraficante han sacudido las redes sociales.

«La Barbie» 

En el plano personal, «La Barbie» se mostró arrepentido, y a pesar de su contacto con grupos muy violentos, aseguró que nunca había asesinado a nadie: «yo, en mis 44 años, nunca he asesinado a nadie. Hay muchas personas siendo asesinadas, pero yo nunca he asesinado a nadie».

Ese mismo día, además de confesar su papel como infiltrado, el criminal dijo ser cristiano y pidió perdón por sus crímenes a su familia. Para lavar sus culpas manifestó su deseo de convertirse en mentor de otras personas con el fin de prevenir el uso de drogas.

«Hablo de mi vida y la uso como un ejemplo para otros, y acompaño a otros y les muestro que una vida en drogas te llevará a prisión o a la muerte. Si se me da la oportunidad, quiero ser mentor de niños y jóvenes en materia de las consecuencias de las drogas. No quiero ni siquiera ver que alguien más cometa los errores que yo cometí», expresó «La Barbie».

Su intención de colaborar con las autoridades era obtener con ello una reducción de condena, pero, la consecuencia de ello fue que él y su familia se convirtieron en blanco de persecución por parte de sus antiguos aliados en el narcotráfico, quienes lo acusaron de traidor.

La Barbie DEA Chapo
Valdez Villarreal detalló que Estados Unidos quería enviar un mensaje a otros miembros de los cárteles mexicanos a través de su historia.

Lea además: EEUU confirma cadena perpetua al “Chapo” Guzmán

No se arrepiente 

Pese a todo, Edgar Valdez Villarreal se dijo convencido de haber tomado la mejor elección al convertirse en un informante: «sé en mi corazón que he hecho lo correcto, y sé que Dios ha liberado mi vida por mayores razones».

Su «canto» ayudó a que detuvieran en una ocasión al líder del Cártel del Pacífico, Joaquín Guzmán Loera y a que la Marina Armada de México ubicara a su amigo y jefe, Arturo Beltrán Leyva, El Barbas, dos de los mayores responsables de la ola de violencia en México.

Ahora, el paradero de «La Barbie» desató una polémica en México y Estados Unidos, por lo que el gobierno de aquél país tuvo que salir a aclarar que el capo sigue bajo custodia de las autoridades.

Fuente: Infobae, El Milenio

Estás a un paso de recibir nuestro PDF Gratis

Última Hora

Hoy en Cronómetro

error: Contenido Protegido