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viernes, marzo 29, 2024

Día 9 | Fuentes se asoció con el gobierno, «es culpable»: Fiscalía antes del veredicto

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HONDURAS. El presunto narcotraficante hondureño Geovanny Fuentes Ramírez está próximo a conocer su veredicto, ¿Culpable o inocente? La moneda está en el aire y el jurado tendrá la última palabra.

Han pasado nueve días de juicio: uno de alegatos iniciales por parte de la Fiscalía y de la defensa, siete de presentación de testigos y evidencia contra el acusado y uno más de conclusiones finales.

El enjuiciamiento comenzó el lunes 8 de marzo, pero tuvo una interrupción el viernes 12 por sospechas de COVID-19 en uno de los miembros del jurado. Tal y como se había previsto, tendrá una duración total de, máximo, 10 días. Hoy podría haber veredicto, aunque, podría aplazarse para el lunes 21 de este mismo mes.

Conclusión de la Fiscalía:

Pero, antes de eso, tanto la parte acusadora como los abogados del encausado tienen derecho a unas conclusiones finales para tratar de persuadir al jurado.

Habló el Fiscal Federal Adjunto (Assistant US Attorney – AUSA por sus siglas en inglés), Jacob Gutwillig, diciendo, entre otras cosas, que Goevanny Fuentes trabajó junto con el gobierno de Honduras y sus fuerzas de seguridad para traficar cocaína.

A continuación, se le presentan de forma íntegra las declaraciones de cierre de la parte acusadora, dados a conocer Matthew Russell, periodista estadounidense que cubre el juicio desde la misma Corte:

Ha oído que el acusado traficaba toneladas de cocaína a los Estados Unidos. Ha aprendido sobre su laboratorio de drogas, custodiado por hombres armados. Solía ​​comprar y pagar a policías y políticos.

El acusado entregó dinero en efectivo en un trato corrupto con el futuro presidente de Honduras. El acusado comenzó con kilos en Miami. ¿Cómo se levantó? Se asoció con cárteles, compró policías y asesinó gente.

Empezó trabajando con ‘Metro’, primo de los dirigentes de ‘Los Cachiros’, Javier y Leonel Rivera. Cuando el trabajo en Miami fracasó, abrieron un laboratorio de drogas en Cerro Negro. En Honduras un kilo de cocaína vale unos US$ 9000 dólares.

El acusado le contó a Leonel Rivera sobre su laboratorio, en la gasolinera de Rivera. Más tarde, hubo una redada, pero debido a los contactos del acusado con policías corruptos, sacó las drogas. Y asesinó al policía.

El imputado secuestró y asesinó al policía que dirigía la investigación. Le puso una bolsa de pan en la cabeza, ‘Metro’ lo golpeó con una pistola y le rompió los dedos. Lo interrogaron, despejaron a Jarufe y luego le dispararon con lo que llamaron «tiros de piedad».

José Sánchez, el contador, sabía sobre el laboratorio. Jarufe lo envió allí con dinero en efectivo. En ambas ocasiones lo detuvo la seguridad armada, no los caficultores. El acusado había matado a su manera de salir de la primera investigación y compró su salida de la segunda. Pagó a Barahona un soborno.

Sánchez le dijo que en 2013, Juan Orlando Hernández había designado a Barahona y se postulaba para presidente. Los Cachiros pagaron enormes sumas de dinero a JOH, a «Pepe» Lobo, a «Mel» Zelaya y Ricardo Álvarez, quien sería vicepresidente.

Sánchez vio a Jarufe, al acusado y a Juan Orlando Hernández reunirse. JOH tomó US$ 15,000 en efectivo. JOH quería tener acceso a la cocaína del acusado. El laboratorio estaba cerca de Puerto Cortés y JOH quería exportar por allí. Entonces, Juan Orlando Hernández dijo que le daría al imputado el número de celular de su hermano, Tony Hernández, quien estampó kilos con sus propias iniciales.

Dado que Los Cachiros no invirtieron en el laboratorio de drogas del acusado, él se asoció con Juan Orlando Hernandez y su hermano, Tony Hernandez. El acusado trabajó con el comisionado Martínez para proteger los envíos de drogas. El general Ponce Fonseca es un contacto en el teléfono del acusado.

El acusado mató a un mecánico de botes, para congraciarse con Los Cachiros, a quienes el mecánico se jactaba de robar. Entonces, Fuentes comenzó a trabajar con Leonel Rivera: un cargamento de 500 kilos del colombiano Vargas Rentería.

Hubo otro envío aéreo a las pistas de aterrizaje de Fredy Najera. El acusado lo transportó, armado con lanzagranadas. Trabajó con el cártel de Sinaloa bajo el mando de «El Chapo» Guzmán. Ahora el acusado y ‘Metro’ eran rivales de Los Cachiros. Pronto, el acusado intentó matar a Leonel Rivera. Posteriormente Leonel Rivera se convirtió en cooperador.

Espero que la defensa diga que el negocio de Geovanny Fuentes con Jarufe era legítimo, pero fue solo lavado de dinero. Jarufe le dio la tierra para el laboratorio de drogas. El acusado llegó a un acuerdo con Juan Orlando Hernández para mantener el laboratorio en funcionamiento.

Geovanny Fuentes le dijo a Leonel Rivera que siguió pagando sobornos a Juan Orlando Hernández hasta 2019, que se reunió con un oficial militar por lavado de dinero a pedido de JOH.

En mayo de 2019, cuando salieron pruebas sobre JOH en el juicio de Tony Hernández, el acusado recibió indicaciones para llegar al Palacio Presidencial. Y de nuevo en otra ocasión. Estaban vigilando de cerca el caso de Tony Hernández y las pruebas que contenía.

Geovanny Fuentes tiene el número de celular del presidente y el del vicepresidente. Tiene decenas de oficiales policiales y militares. Han escuchado cómo el imputado, con el presidente Juan Orlando Hernández, se rió diciendo que empujarían las drogas por las narices de los estadounidenses.

La evidencia muestra que el acusado conspiró para traficar drogas a los Estados Unidos, con armas de fuego. Él es culpable. Gracias.

Luego de eso, el juez Kevin Castel anunció que era la hora del primer receso de la jornada.


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