Redacción. Un video publicado en TikTok se ha convertido en tendencia al capturar la desilusión de dos jóvenes que, con mucha ilusión, organizaron una fiesta sorpresa de cumpleaños para su madre sólo para ser rechazadas por ella, quien prefirió ir a trabajar.
El caso ha generado un intenso debate en redes sociales, donde los internautas han expresado opiniones divididas. Mientras algunos pidieron comprensión hacia la madre, otros señalaron que su actitud fue demasiado dura con sus hijas, sugiriendo que no deberían volver a organizarle ninguna celebración.
¿Cómo reaccionó la madre ante la sorpresa?
Con la intención de brindarle un momento especial, las jóvenes prepararon con esmero la celebración. Para ello, mandaron a hacer una gran olla de pozole y compraron un pastel, con la esperanza de sorprender y alegrar a su madre en su día especial.
Sin embargo, su reacción fue todo menos esperada. Según relataron en el video, la mujer no únicamente rechazó la fiesta, sino que también les recriminó por haber gastado dinero en ella.
«No quiero, ni para qué gastan. Yo voy a ir a trabajar, no quiero nada», fueron las palabras que, según las jóvenes, su madre les dijo antes de salir de casa.
A pesar de la tristeza que les causó la situación, intentaron mantener el buen ánimo y continuaron la velada junto a su padre, disfrutando del pozole que habían preparado con tanto cariño. Pero aunque tomaron la situación con humor, la decepción en sus rostros era evidente.
Reacciones divididas en redes sociales
El video rápidamente se volvió viral, acumulando miles de reproducciones, “me gusta” y comentarios de usuarios que debatieron sobre el tema.
Algunos criticaron la actitud de la madre, señalando que sus hijas solamente querían hacerla sentir especial.
- «No valoró el esfuerzo de sus hijas, Yo, en su lugar, hubiera llorado de felicidad», comentó un usuario.
- «Si alguien hace algo bonito por ti, lo mínimo es agradecer. Fue muy fría con ellas», añadió otra persona.
Por otro lado, algunos pidieron comprensión hacia la madre, argumentando que tal vez estaba pasando por un mal momento o que su reacción podría estar influenciada por experiencias de su infancia.
- «Mi mamá es así, pero poniéndome en sus zapatos, creo que no puede recibir algo que nunca le dieron. Muchas de nuestras madres tuvieron infancias difíciles», expresó una usuaria.
- No se sientan mal… A veces esto es una herida de infancia reflejada en su comportamiento», opinó otra persona.
Otros recomendaron a las jóvenes no volver a organizarle nada si su madre no lo desea.
- «Si ya saben que no le gusta, no le hagan más fiestas. No es obligación celebrarle nada».
El caso ha abierto un debate sobre la importancia de la comunicación en la familia y la manera en que algunas personas expresan –o no– su afecto. Mientras para muchos una celebración es una muestra de amor, para otros puede ser un gesto incómodo o incluso innecesario.
Vea el vídeo:
