Redacción. Un nuevo caso de violencia de género ha conmocionado la zona oriental de Honduras, donde una joven madre de 19 años fue asesinada a balazos, presuntamente a manos de su expareja.
A la víctima la identificaron como Katia Sánchez, quien lastimosamente perdió la vida en el caserío Herraudal, a orillas del río Coco, en el municipio de Trojes, El Paraíso.
Según testigos, la víctima y su agresor sostuvieron una acalorada discusión que terminó en tragedia cuando él sacó un arma de fuego y le disparó en múltiples ocasiones. Luego del crimen, el sujeto huyó en un pipante (embarcación tipo canoa) con rumbo desconocido.
Familiares y amigos de Katia exigen justicia, mientras su cuerpo es velado en el barrio Jazmínez, en el casco urbano de Trojes. La joven deja en la orfandad a un niño de apenas un año de edad.
Las autoridades de la Policía Nacional han iniciado operativos para dar con el paradero del responsable, pero hasta el momento no han logrado su captura. Existen sospechas de que el hombre aún se encuentra en territorio hondureño.
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Femicidios en Honduras
Este femicidio ha generado indignación en la comunidad, que demanda mayor acción por parte del gobierno para prevenir y castigar la violencia contra las mujeres.
Según organizaciones defensoras de los derechos de las mujeres, Honduras sigue registrando altos índices de violencia de género, con decenas de femicidios reportados cada año.
A pesar de que Honduras cerrará el 2024 con la tasa de femicidios más baja en 18 años, las organizaciones de protección a la mujer advierten que este avance sigue siendo insuficiente ante una realidad alarmante.
El caso de Katia Sánchez no solo deja una familia destrozada, sino que también evidencia la necesidad urgente de medidas más efectivas para proteger a las mujeres en riesgo. Mientras tanto, su familia llora su pérdida y clama porque este crimen no quede impune.
