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jueves, marzo 28, 2024

Jem Rosa Dugall, primera hondureña con título de Ingeniero Naval

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Disciplinada, carismática y apasionada, tres de las palabras que describen a la mujer que con su talento y perseverancia puso en alto el nombre de Honduras al ser la primera en obtener el título de Ingeniero Naval en Construcción y Reparación de Buques.

Jem Rosa Dugall de 22 años de edad, es originaria de Guanaja, Islas de la Bahía, y actualmente es residente en Panamá. Jem se graduó en el 2013 y el siguiente año ya emprendía camino para estudiar lo que siempre había soñado.

Aunque siempre obtuvo el apoyo de su familia, una dura noticia la impactó a tal punto que puso en balanza sus estudios y sus seres amados. Asegura que la razón para continuar su recorrido fue una promesa y el pasado 30 de noviembre concluyó su carrera.

Con apenas 22 años, Dugall es Ingeniero Naval en Construcción y Reparación de Buques; un título que nadie más en el país posee. Asimismo, su esfuerzo se destaca aún más cuando logra acceder al sistema educativo panameño; reconocido como uno de los mejores a nivel latinoamericano.

Jem Dugall es una mujer amable y dedicada a lo que ama. Además, asegura que Honduras necesita cambios en el área educativa. Es así que alienta a niños y jóvenes que desean salir adelante y pide que no se den por vencidos.

A continuación la entrevista exclusiva con Jem Indira Rosa Dugall:

1. ¿Quién es Jem Dugall? Cuéntenos un poco sobre usted.

Mi nombre es Jem Indira Rosa Dugall, tengo 22 años y soy orgullosamente de Guanaja, Islas de la Bahía. Soy una chica apasionada por el arte y la mar, tanto que he diseñado el logo oficial del Festival del Caracol en 3 ocasiones y espero hayan más. En el 2012 terminé mi secundaria y me gradué en el Instituto María Regina en la ciudad de La Ceiba.

En enero del año siguiente (2013) tomé vuelo hacia Panamá y fue aquí donde comencé mis estudios profesionales en la Universidad Marítima Internacional de Panamá y este pasado 30 de noviembre culminé mis estudios de Ingeniería Naval en Construcción y Reparación de Buques.

2. Sobre sus estudios académicos en el exterior, ¿cómo logra conseguir la oportunidad de salir al extranjero?

Pues junto con mis padres comenzamos a investigar sobre universidades que tuviesen la carrera y así fue como descubrimos la UMIP en el 2012 y ese mismo año viajé junto a mi papá a hacer el examen de admisión. Gracias a Dios, varias noches de desvelo y estudio, lo pasé y me aceptaron en la universidad.

3. ¿Por qué la decisión de convertirse en Ingeniero Naval?

Llevo el océano en las venas, tanto que fui concebida en alta mar jeje. Mi papá es capitán de barco y desde pequeñita cuando él se encontraba en casa me gustaba acompañarlo a ver el barco donde él laboraba. Siempre me encantó.

Lo que no me gustaba de su trabajo era que siempre estaba lejos de mí y de la familia hasta por 6 a 8 meses. Una vez ya más grande decidí que quería una carrera que me acercara a la mar y los barcos pero que me permitiese estar cerca de mi familia y así fue como tomé la decisión de ser Ingeniero Naval pues esto me permitiría tener las 3 cosas a la vez.

4. ¿Cuál es el cambio que espera generar aportando sus conocimientos en un área tan esencial en Guanaja?

Guanaja es una isla dedicada a la pesca sobre todo y no tanto a la construcción o reparación, pero cada que me doy cuenta que se da alguna catástrofe en alta mar, tales como pérdida de vidas, naufragios, colisiones y otros  que involucran a nuestras embarcaciones me doy cuenta que es sumamente necesario e importante traer consciencia a nuestra isla de los diferentes convenios y normas que amparan a las embarcaciones de pesca y su tripulación, y exigir a las autoridades de puerto hacer respetar estas reglas como lo son el convenio 188 de la OIT o las Normas ISO 9001 que exigen calidad para evitar estos tipos de accidentes.

5. ¿Cuáles son los retos que encontró al estudiar en el exterior?

Gracias a Dios tuve una madre que en vida siempre me enseñó junto a mi papá a ser una persona independiente y autosuficiente. Salí de casa a terminar mi secundaria a los 16 años y la verdad es que al momento de llegar a Panamá lo único difícil que encontré fue pasar tanto tiempo lejos, sin ver a mi familia.

6. ¿Cómo calificaría el sistema educativo hondureño en comparación con el panameño?

Puedo hablar solamente por experiencia personal. La formación que recibí en el Instituto María Regina para mí fue tan buena que al momento de llegar a Panamá la parte académica no se me hizo difícil en lo absoluto. Por otra parte, he podido observar que el sistema educativo panameño sí brinda más oportunidades de superación a sus estudiantes y mucho más interés en que los jóvenes terminen por completo sus estudios.

No podemos olvidar que por algo Panamá es el líder de la región centroamericana en cuanto a su sistema educativo y uno de los más altos de Latinoamérica en comparación con Honduras que lamentablemente está en un nivel más bajo.

7. Actualmente, ¿se encuentra laborando y dónde?

Aún no me encuentro laborando, pues hace 2 semanas y media que terminé mis estudios. Lo que sí puedo decir es que el próximo año hay una práctica sorpresa que aún no puedo revelar hasta estar 100% segura y la compartiré en mis redes una vez reciba confirmación.

8. ¿Piensa regresar a Honduras en algún momento?

Por el momento no lo he considerado ya que no hay un campo donde pueda desenvolver mi profesión de la manera en la que me gustaría, pero regresar a Honduras tampoco es un imposible porque uno nunca sabe las vueltas de la vida.

9. ¿Ha recibido apoyo de su familia? ¿Qué ha sido lo más difícil de viajar a otro país a estudiar?

Mi familia ha sido mi mayor motor de apoyo. Gracias a Dios por bendecirme con unos padres que siempre se han sacrificado y lo continúa haciendo mi papi para darme siempre lo mejor.

Lo más difícil para mí de estar en otro país estudiando fue cuando mi mamá falleció en el 2016. Logré ir a casa a darle un último adiós, pero 1 semana después tuve que regresar a Panamá y sacar fuerzas para regresar a la universidad pues yo siempre le prometí terminar mis estudios. Es difícil estar en otro país sin familiares cuando uno está atravesando momentos como ese.

10. ¿Cuáles son las dificultades que como mujer se ha encontrado que tal vez no es algo que afrontan los hombres?

Doy gracias a Dios por encontrarme en un lugar donde nunca fui tratada de manera distinta a la que sería tratado un hombre, donde lo que estuvo más cerca a ser una dificultad fue hacer más pechadas que un compañero varón.

11. ¿Qué recomienda a los hondureños que tienen el deseo de superarse?

Que perseveren. Que nunca dejen que nadie les diga que sus metas y sus sueños son imposibles de alcanzar. Somos nosotros mismos quienes determinamos la capacidad que tenemos para alcanzar el éxito y que siempre tengan en mente que el que no arriesga no gana, así que rendirse no es una opción. El hondureño es un ser fuerte, cuenta con la actitud, positivismo y determinación para llegar lejos.

12. ¿Cuál es el sentir de un hondureño que pone en alto el nombre de su país?

A mí me llena de tanta emoción, orgullo, satisfacción y sobre todo de alegría poder dar a conocer mis logros, los mismos que son del país, porque en Honduras no todo es malo y con este logro y el de muchos otros hondureños lo hacemos constar.

13. Para usted, ¿cuál es el cambio que la nación necesita?

Urge un cambio en el sistema educativo de Honduras. No puede ser que continuemos año tras año en un nivel tan bajo en algo tan esencial como lo es la educación. Este debe ser un tema de prioridad para las autoridades.

Debe haber más enfoque en brindar oportunidades al estudiante, porque Honduras cuenta con una multitud de jóvenes con deseos de salir adelante pero lamentablemente no cuentan con la facilidad económica y es allí donde el sistema educativo tiene que tomar acción, pues hay muchos diamantes en bruto esperando a ser pulidos.

Envíe un mensaje a todos los niños y jóvenes hondureños para que no se desanimen y continúen estudiando y esforzándose.

Quiero decirles que a pesar de los mil obstáculos que se puedan encontrar en el camino, que no se rindan. Que cada día que decidan levantarse y seguir adelante es un paso que están dando hacia la meta y que cuando menos se acuerden van a llegar y se darán cuenta que todo valió la pena y por último que nunca olviden que los estudios son uno de los mayores tesoros que podemos tener hoy en día en nuestra vida.

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