ATLÁNTIDA, HONDURAS. Un incendio de grandes proporciones consumió un reconocido bar, llamado «Blue Bar», ayer, en horas de la noche, en el barrio La Isla, de la ciudad de La Ceiba, zona atlántica del país.
El siniestro se produjo a eso de las 10 de la noche y elementos del Cuerpo de Bomberos se trasladaron rápidamente a realizar trabajos para combatir el incendio.
Luego de varias horas, pudieron controlarlo y evitaron que el fuego se propagara hacia otros negocios y viviendas aledañas.
El negocio quedó reducido prácticamente en escombros, sin embargo, no se reportaron pérdidas de vidas humanas, solo daños materiales.
Hasta el momento, no se ha dado un informe que revele las causas del origen del incendio que consumió con sus llamas este popular centro nocturno.
Por su parte, varias personas lamentaron lo ocurrido, pues aseguraron que los propietarios llevaban el sustento a su casa gracias a este negocio.
Vea los vídeos:
«Uno no tiene que ser egoísta, porque con sacrificio la señora tiene ese puesto y también hace una gran labor generar trabajo, yo cuando he ido a comprar he visto más de 5 mujeres trabajando honradamente, ya ese es un avance y lo que hay que hacer es darle gracias a Dios, que otras personas prosperen», indicaron.
«Sea lo que sea ese negocio, ellos llevan el sustento gracias a eso. Dejemos de satanizar y juzgar, ahí es cuando habrá un nuevo cambio en los hondureños», comentaron.
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Otro incendio
Tres personas muertas, incluyendo a una menor de un año y medio, es el resultado de un pavoroso incendio que se registró hace unos días en el departamento de Comayagua.
De acuerdo con la información preliminar de lo sucedido, cuatro miembros de una misma familia salieron afectados por las llamas del siniestro.
Dos de las personas fallecidas respondían al nombre de Ariela Medina, de tan solo un año y medio de edad, y su abuela, Antonia Odilia Rodríguez.
Los padres de la menor se encontraban en estado crítico producto de las quemaduras por el incendio y uno de ellos murió horas después.
De acuerdo a la información preliminar de lo ocurrido, en la casa de habitación de los afectados no había energía eléctrica. El papá de Ariela, identificado nada más como Franklin, habría colocado accidentalmente un galón de gasolina cerca de una candela.
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