Tegucigalpa: Se unen a conmemoración del Domingo de Ramos

Domingo de Ramos en la capital hondureña.

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Domingo de Ramos
Domingo de Ramos

TEGUCIGALPA, HONDURAS. Feligreses hondureños se unieron desde horas tempranas  a la celebración del Domingo de Ramos en la capital de Honduras.

La tradicional procesión, es la que recuerda la entrada gloriosa de Jesús a Jerusalén.

Asimismo, es la apertura de la Semana Santa en el país. La conmemoración se realiza en todas las parroquias de la Iglesia Católica en Honduras. Donde los fieles portando en sus manos las palmas de oliva.

El cardenal, Oscar Andrés Rodríguez dio el mensaje de bienvenida en la catedral Miguel Arcángel de Tegucigalpa. Agradeció, al altísimo por tener la oportunidad de poder celebrar otro Domingo de Ramos.

El seminarista invitó al pueblo a vivir la pasión de Cristo. Asimismo, festejando la entrada de Dios a nuestro corazón y de las familias porque este es tiempo para regocijarse.

Expresó, que es una acción capaz de devolver la esperanza a la sociedad en general y al interior de cada hogar. “Nuestro mensaje es fijar la mirada en la Pascua en la resurrección de Jesús, lo mismo que también resucita en nuestros corazones”. Añadió.

También, pidió a los feligreses trabajar por la paz para que realmente Cristo entre en la ciudad.

Reseña histórica.

El Domingo de Ramos es una celebración religiosa en el que la mayoría de las denominaciones del cristianismo conmemoran la entrada de Jesucristo a Jerusalén.

Después de esta fecha, da inicio a la Semana Santa, de acuerdo a los evangelios canónicos, la Entrada a Jerusalén describe el momento en que Jesús de Nazaret entró triunfalmente a Jerusalén, en medio de una multitud que lo aclamaba.

Antes de entrar a Jerusalén, Jesús se detuvo en Betania y Betfagé y el Evangelio de Juan añade que cenó con Lázaro y sus hermanas María y Martha. Ahí, se describe que Jesús envió a dos discípulos (no mencionados) a la aldea cercana, con órdenes de recuperar un burrito que había sido atado, pero nunca montado y dijo. «Si os preguntan, decid que el Señor necesita el burrito, y que les será devuelto luego».