Redacción. Una mujer murió ayer en la aldea Piedra Blanca, ubicada en el departamento de Yoro, presuntamente por ser una «bruja», así lo expresaron personas que fueron detenidas por el crimen.
Tras reportarse que una mujer había sido ultimada y que luego sus agresores habían quemado su cuerpo, personal de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI) se movilizó al lugar para comenzar con las indagaciones del caso.
Horas después se reportó la detención de varias personas, a quienes se les atribuía el asesinato de la fémina.
Era una «bruja»
Los hombres y mujeres manifestaron que ellos cometieron el asesinato, porque la víctima era «la bruja del pueblo».
Uno de los detenidos, cuya identidad no se reveló, aseveró que había «matado muchas personas» y que por eso tuvieron que acabar con su vida. Asimismo, catalogó a la fémina como «Satanás».
«(Ella) era Satanás, la matamos con arma blanca y participó sólo mi familia«, dijo uno de los hombres a un medio local.
Una de las mujeres que se detuvo afirmó que a la occisa se le llamaba «la bruja del 61″ y que era una peligrosa persona.
«Este asesinato fue en venganza contra la mujer a la que llamaban ‘la bruja del 61′», grita la mujer mientras era custodiada por varios agentes de la Policía Nacional.
Los primeros detenidos son familia, la cual incluye una joven de 19 años, otro de 46 y un tercero de 42; mientras el cuarto y quinto supuesto participante es una femenina de 37 años, originaria de Tegucigalpa y residente en la aldea Piedras Blancas, y el último un ciudadano del sexo masculino de 32 años, originario de Olancho.
Vea el video:
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Antecedente
El informe del caso señala que la mujer estaba en su casa, a donde llegaron varios hombres que ingresaron y le dispararon en reiteradas ocasiones.
Los impactos de bala acabaron de manera instantánea con su vida; no conformes con ello, rociaron gasolina sobre el cuerpo para quemarlo.
Posteriormente, tras cometer su crimen, huyeron del lugar. El cadáver calcinado quedó en el patio de la casa, a donde posteriormente llegaron elementos de la Policía Nacional (PN).
Los agentes procedieron a acordonar el área y alertaron a los médicos forenses.
