Redacción. En medio de la euforia de un partido de fútbol en el Estadio Francisco Morazán, un acto de compasión sobresalió entre la multitud. Una joven, Sarahi Fúnez, quien padece de lupus, se encontraba recolectando dinero entre los aficionados para cubrir sus gastos médicos.
Con un botellón en mano, recorría las gradas, intentando juntar dinero para su tratamiento.
De pronto, el cansancio y los síntomas de su enfermedad la abrumaron. Al ver que se sentía mal, el oficial de policía Alejandro Rodríguez se acercó de inmediato. Sin dudarlo, tomó el botellón de las manos de la joven y continuó la labor por ella.
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El gesto desinteresado del agente no pasó desapercibido. Su acción conmovió a los presentes, quienes vieron cómo, más allá de su deber, el oficial demostraba una profunda empatía.
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Tras el conmovedor momento, Sarahi Fúnez expresó su gratitud: «Por medio de este video quiero darle gracias al oficial Alejandro Rodríguez por haberme ayudado. A todos los que me apoyaron en el estadio, Dios los bendiga grandemente», apuntó.
Ayuda
Rodríguez también se pronunció para agradecer el apoyo y pidió más ayuda para Sarahi. «Nada que agradecer señorita, estamos para servirle en lo que usted desee. Primero Dios confiemos que va a mejorar. Más bien gracias a usted por dejarse apoyar».
Luego, expresó un sincero deseo de bienestar para todos los que se unieron a la causa: «Dios los bendiga mucho y bendiciones para ustedes y sus familias».
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Este acto de bondad demuestra que, incluso en un lugar tan concurrido como un estadio, la humanidad y la solidaridad pueden marcar la diferencia en la vida de alguien. Es un recordatorio de que la empatía tiene el poder de transformar momentos difíciles en experiencias llenas de esperanza.
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