Redacción. El desbordamiento del Lago de Yojoa ha sumergido bajo el agua a más de 45 viviendas tras las precipitaciones de los últimos días.
La crecida del embalse natural ha impactado severamente a comunidades como Las Marías y Las Vegas, en Santa Bárbara, además de afectar puntos críticos en Agua Azul Sierra, Peña Blanca y Las Conchas.
Esta situación ha dejado incomunicado el acceso hacia El Novillo, donde la acumulación de agua impide el libre tránsito.
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Calles anegadas
Durante las inspecciones realizadas por la Unidad Metropolitana de Policía (Umep-13), se confirmó la gravedad del desastre, reportando calles totalmente anegadas y la necesidad de evacuaciones preventivas para salvaguardar vidas.
Los residentes de la zona señalaron que la crisis no es sólo climática, sino ambiental, atribuyendo la magnitud de las inundaciones a la excesiva acumulación de desechos sólidos y a la invasión de humedales, lo que ha mermado la capacidad de absorción del suelo.
En el ámbito técnico, la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) informó que los daños en las turbinas provocados por la crecida no serán solventados a corto plazo. Se estima que las reparaciones culminarán hasta el 26 de enero de 2026.
Según los reportes de Cenaos y Copeco, las condiciones de lluvias derivan de una masa de aire frío proveniente del Caribe, que mantendrá precipitaciones e incluso tormentas eléctricas en los departamentos de Atlántida, Colón, Cortés y Yoro.
Frente frío
El cierre de 2025 y el amanecer del nuevo año en Honduras estarán marcados por un notable cambio en las condiciones climáticas.
De acuerdo con el último informe del Centro Nacional de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos), el país experimentará un descenso en las temperaturas. Asimismo, registrará la presencia de lluvias debido al ingreso de una masa de aire frío de intensidad débil.
