Redacción. El ministro de Finanzas, Christian Duarte, reconoció que el Gobierno está buscando recursos para cumplir con el pago de salarios, aguinaldos y bonos a diferentes sectores, incluyendo policías y maestros, tras recibir denuncias de retrasos en varias instituciones.
Durante una conferencia de prensa, Duarte explicó que los pagos dependen de los recursos cargados en el sistema financiero y del avance de los proyectos priorizados, especialmente aquellos ya concluidos o con progreso significativo.
El funcionario detalló que la cartera presupuestaria enfrenta limitaciones debido a la negativa de algunas bancadas a aprobar créditos.
En total, la deuda flotante asciende a cerca de 15,000 millones de lempiras.
Solo durante diciembre se lograron colocar L1,100 millones en el mercado nacional y otros L1,300 millones mediante recursos ociosos de instituciones públicas.
Según Finanzas, estos fondos permitieron cubrir salarios y aguinaldos de los sectores priorizados, incluidos policías y docentes. La nómina de ambos sectores aumentó por la incorporación de 3,000 efectivos y los incrementos salariales aplicados durante el año.
Duarte destacó que la ejecución presupuestaria de este año alcanzará un 91%.
Además, subrayó que la falta de un presupuesto aprobado para 2025 por parte del Congreso limita la planificación financiera.
Los recursos que ingresen a partir de enero se depositarán en la Caja Única del Tesoro.
Según datos oficiales, los ingresos diarios promedio de la recaudación fiscal y aduanera oscilan entre 80 y 120 millones de lempiras.
Fideicomisos con fondos
El ministro también mencionó que el Gobierno anterior dejó fideicomisos con fondos no utilizables, lo que dificultó la disponibilidad de recursos al asumir la administración.
Asimismo, explicó que la política de endeudamiento se ajusta para reducir plazos y mantener tasas de interés entre 8 y 11%, mientras que los recursos recuperados de fondos ociosos se destinan directamente a la caja del Estado sin generar intereses adicionales.
Duarte señaló que uno de los principales retos para el próximo gobierno será ejecutar programas de inversión pública con el presupuesto disponible.
Aclaró que esto debe lograrse sin incrementar impuestos ni recurrir a privatizaciones o fideicomisos, prácticas que han generado opacidad y demandas internacionales, como ocurrió con el aeropuerto de Palmerola.
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