El Paraíso, Honduras. En medio de las protestas y tomas de calles que mantienen bloqueadas varias entradas y salidas de la ciudad de Danlí, una historia de vocación y compromiso con la salud ha conmovido a la población hondureña. Se trata de la doctora internista Ligia Sevilla, quien, ante la imposibilidad de movilizarse en vehículo, decidió trasladarse en bicicleta hasta el Hospital Gabriela Alvarado para cumplir con su labor médica.
Desde tempranas horas, las tomas impedían el paso vehicular en distintos puntos de la ciudad, afectando la circulación de transporte público y privado. Sin embargo, esta situación no se convirtió en obstáculo para la doctora Sevilla. Ella pedaleó varios kilómetros con el único objetivo de llegar a tiempo al centro asistencial y atender a sus pacientes. Su llegada al hospital se recibió con gestos de admiración y palabras de reconocimiento por parte de colegas, personal de salud y ciudadanos que presenciaron el momento.

Su acto se volvió ejemplo
El acto de la doctora Ligia Sevilla rápidamente se volvió un ejemplo de vocación de servicio y amor por la profesión médica. Generó múltiples reacciones positivas en redes sociales. Decenas de personas destacaron su entrega, compromiso y humanidad. Resaltaron que su acción representa el verdadero espíritu del personal de salud hondureño, que muchas veces enfrenta condiciones difíciles para cumplir con su deber.
“Tenía que ser hija de uno de los mejores médicos que ha tenido nuestra querida ciudad de Danlí, el doctor Fernando Sevilla. Tienen el don de servir en la sangre”, comentó un ciudadano, haciendo referencia al legado familiar de la doctora. También, otros mensajes subrayaron su buen corazón, su actitud siempre amable y la sonrisa con la que atiende a los pacientes, cualidades que la han convertido en una profesional muy querida en la comunidad.

