Redacción. El expresidente hondureño Manuel Zelaya, coordinador del Partido Libertad y Refundación (Libre), rechazó de manera rotunda las acusaciones realizadas por el Partido Nacional sobre un «autogolpe» y denunció la intromisión directa de Estados Unidos en las elecciones generales de Honduras.
Según Zelaya, su protesta y movilización son pacíficas y buscan denunciar irregularidades en el proceso electoral, así como defender la soberanía del pueblo hondureño.

“Niego rotunda y categóricamente esa falsa acusación del Partido Nacional. Resulta grave y deplorable que una agencia internacional de prestigio informe sobre una denuncia infundada, sin consignar ni contextualizar el verdadero motivo de nuestra protesta pacífica”, expresó Zelaya.
El exmandatario subrayó que su movilización responde al «escandaloso fraude electoral electrónico reportado por el TREP, ya denunciado por observadores internacionales».
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Además, criticó la supuesta injerencia extranjera directa y pública en las elecciones hondureñas por parte del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Elecciones en Honduras
Zelaya señaló que Trump amenazó al pueblo hondureño si votaba por su candidata, llamó a apoyar al candidato del Partido Nacional y perdonó al expresidente Juan Orlando Hernández, condenado a 45 años de cárcel por narcotráfico en Estados Unidos, favoreciendo de manera indirecta al Partido Nacional.
En declaraciones recientes, Trump afirmó: «Apoyé a alguien que no lideraba el recuento y ganó las elecciones de Honduras», lo que Zelaya consideró un acto de intromisión que socava la democracia del país.

“Ocultar estos hechos o relativizarlos no contribuye a la verdad ni a la democracia, sino que encubre un golpe electoral contra la voluntad soberana del pueblo hondureño”, añadió.
El coordinador de Libre insistió en que la protesta es pacífica y la denuncia es legítima.

Su pronunciamiento refleja la tensión existente en Honduras por las recientes elecciones y el escrutinio general de los resultados. Esto ocurre en medio de señalamientos de fraude y de la participación de actores extranjeros en los procesos internos.



