Redacción. Un fuerte operativo de desalojo ejecutado por la Policía Nacional se desarrolló este lunes en una finca camaronera en el sector Quebrada de Arena, en Tocoa, Colón, cuyo traspaso había iniciado de manera pacífica, pero que ahora se encuentra en medio de un ambiente de alta tensión.
A pesar de las órdenes emitidas y de la presencia de un amplio contingente policial, decenas de personas se resisten a abandonar el terreno, lo que ha provocado disturbios y enfrentamientos.
Desde horas tempranas, la Policía Nacional permanecía en los límites superiores de la finca. Los agentes supervisaban la zona mientras se realizaban los primeros procedimientos legales de entrega.
Sin embargo, el ambiente cambió rápidamente cuando las autoridades intentaron ejecutar el desalojo formal. Varias personas que ocupan el terreno se negaron a retirarse y comenzaron a reaccionar de manera violenta.
Testigos señalaron que los pobladores han lanzado piedras y otros objetos contra los agentes, dificultando el avance del operativo.
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Conflicto en Colón
La situación se ha convertido en una confrontación directa, obligando a la Policía a replegarse temporalmente en algunos puntos mientras evalúan la estrategia para retomar el control sin poner en riesgo vidas.
En redes sociales se muestra el momento exacto en que los disturbios se intensifican. En las imágenes se observa como grupos de personas bloquean el paso, gritan consignas y rechazan salir del terreno, mientras que a unos metros la Policía se mantiene posicionada, esperando órdenes para avanzar.
Pese a la violencia, algunos manifestantes aseguran que permitirán el ingreso de los agentes “sin problemas”, aunque sus acciones contradicen estas declaraciones, ya que continúan arrojando piedras y objetos contundentes hacia la zona donde se encuentran las autoridades.
Esto ha complicado aún más la labor policial y ha generado incertidumbre sobre cómo se resolverá la situación.
La Policía Nacional continúa ejecutando el desalojo en la zona, manteniendo un fuerte despliegue mientras avanza el ingreso de los agentes a la propiedad.
