Redacción. El anuncio del indulto al expresidente Juan Orlando Hernández (JOH), emitido este viernes por el presidente de los Estados Unidos (EE. UU.), Donald Trump, ha provocado una «sacudida» política en medio del silencio electoral y a horas de las elecciones generales que decidirán al próximo presidente de Honduras.
El mandatario norteamericano reiteró a través de su cuenta de Truth Social su apoyo incondicional a Nasry “Tito” Asfura, del Partido Nacional, y a su vez comunicó el indulto para JOH, quien cumple una condena de 45 años en prisión en EE. UU. por delitos relacionados con el narcotráfico desde 2022.
El mensaje repitió la advertencia al país sobre poca colaboración económica estadounidense hacia Honduras, puesto que Trump dice no confiar en Rixi Moncada ni en Salvador Nasralla, candidatos presidenciales del partido Libre y Liberal, respectivamente.
El anuncio ha generado diversas reacciones políticas, en un ambiente que se vuelve más tenso con cada hora que transcurre. Sin embargo, análisis más neutrales han calificado la posición de Trump como una estrategia meramente electoral que incluso podría jugarle en contra al Partido Nacional.
Política definida
El analista hondureño Oliver Erazo aclaró que el indulto es una facultad constitucional para todos los presidentes de todas las repúblicas del mundo. Además, enfatizó que se trata de una política bien definida.
“Indiscutiblemente, esto parte de lo que es una política definida de los Estados Unidos con relación a quienes ellos consideran como sus socios y amigos y quienes consideran que no son sus socios o amigos”, explicó a Diario Tiempo en referencia a las ideologías políticas de los tres partidos participantes.
«El voto está definido»
El experto también señaló que, pese a tratarse del pensar del presidente más poderoso del mundo, el impacto en el electorado podría ser mínimo.
A esto se suma la imagen política local de los partidos que han cometido irregularidades en el pasado.
“El pueblo hondureño es un pueblo informado y más que eso, es un pueblo que ha sufrido por las malas decisiones en sus historias gubernamentales, por los partidos que han gobernado”, expresó.
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Respecto al tema económico, Erazo confía en que no habrá repercusiones graves, más que aquellas que dificulten la relación entre países.
“Igual (EE. UU.) no puede decirnos que no (trabajará con Honduras) si gana uno de los otros dos candidatos. Lo que sí va a pasar es que va a ser más difícil para los hondureños sentarse a trabajar con ellos, como lo ha sido para China, para Rusia, para México”, cerró.
Efecto negativo en campaña nacionalista
Por su parte, el politólogo Héctor Soto califica el indulto a JOH como un posible efecto contraproducente para el Partido Nacional y su campaña presidencial, pues liberar a Hernández reviviría viejas heridas.
“Ayer Trump anula a Salvador Nasralla. Con eso él dice: esta es una competencia donde yo apoyo a Nasry Asfura y critico a Rixi Moncada. Es decir, plantea que la disputa es Rixi y Nasry Asfura y hoy reivindica a Juan Orlando, esto hace que todo el sentimiento anti-JOH lo vaya a capitalizar, quien quedó como la principal rival de Nasry Asfura que es Rixi Moncada”, explicó a Diario Tiempo.
Para Soto, el discurso de Trump refuerza solamente el voto duro nacionalista, es decir, quienes siempre votan por el partido con arraigo de generaciones, pero anula el voto indeciso debido a la mala imagen que tiene el expresidente en el país.
“Creo que todo este tipo de cosas al Partido Nacional le fortalece el voto duro, pero le quita el voto independiente. Nasry Asfura lleva toda la campaña tratando de alejarse de Juan Orlando, posicionando una idea de renovación y valores, y con este mensaje Trump eliminó todo eso en cuestión de minutos, volvió a poner a Nasry como una continuación de JOH cuando toda la campaña había sido lo opuesto a eso”, expuso.
No suma votantes
Al igual que el analista Erazo, Soto minimizó el impacto en el electorado a favor del Partido Nacional, asegurando que los mensajes del magnate no hacen más que enviar más votantes a Libre.
“Esto va a golpear muy duro el voto independiente. Siento que a Libertad y Refundación le favorece, porque ese sentimiento anti-JOH quien dio la pelea no fue el partido Liberal, sino Libre. Pienso que Nasralla es la gran víctima de todo esto”, opinó.
Criticó la actitud del presidente de Estados Unidos, quien, pese a la vigencia del silencio electoral, reaviva el debate electoral.
“Esto evidencia también lo frágil de nuestro sistema electoral para frenar la influencia en las redes sociales, en medio de un silencio electoral. Claramente, Trump es un hombre que influye, pero también viola nuestro reglamento y nosotros no tenemos la capacidad de frenar eso”, criticó.
Finalmente, Soto aseguró que el discurso norteamericano es meramente estrategia política más que un deseo real de liberar al expresidente hondureño.
“Esto responde más a una estrategia electoral que a un sentimiento verdadero por liberarlo, porque a escasos dos días ya el presidente Trump nos ha demostrado que nos va a bombardear de sacudones todos los días. Creo que la lectura de Trump no es la más correcta, porque ha despertado un sentimiento Anti-JOH”, concluyó.
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«Difícil de medir»
Mientras tanto, el analista Graco Pérez consideró que el indulto llega en un momento particularmente sensible para el país, a solo un día de las elecciones y en pleno silencio electoral, lo que inevitablemente genera efectos políticos difíciles de medir antes del 30 de noviembre.
Según explicó, la reacción del Partido Nacional podría revertirse dependiendo de la percepción del resto de la ciudadanía, recordando que “al final, somos los hondureños quienes vamos a elegir al próximo presidente”.
Pérez enfatizó que el indulto no implica que JOH regrese a gobernar. «El candidato es Nasry Asfura, y cada partido carga con su propio historial».
Asimismo, señaló que cualquier futuro gobierno deberá mantener una relación sólida con Estados Unidos.
Sin embargo, advirtió que esta decisión reabre heridas del pasado, relacionadas con la reelección ilegal, los señalamientos judiciales en el extranjero y el debate sobre la extradición, lo que genera más preguntas que respuestas y revive un capítulo que muchos creían superado.
