Redacción. La esperada graduación del Instituto Esteban Moya, en Yoro, se convirtió en una pesadilla para padres y estudiantes tras el supuesto robo de los fondos destinados a la ceremonia.
El centro educativo se transformó este miércoles en un escenario de discusiones y molestia, luego de conocerse que no hay recursos para el especial evento. Según denunciaron los padres de familia, durante el año escolar se recaudó dinero para la ceremonia final. Sin embargo, a dos días de la graduación, la administración del colegio informó que la tesorera del evento habría hurtado el dinero.
“Nos dice el director que no puede responder por el dinero, porque no era dinero de la institución”, afirmó una de las madres afectadas.

Los denunciantes detallaron que, para la graduación de 29 alumnos, se pagaron 1,200 lempiras por cada uno, lo que representa más de 25 mil lempiras perdidos.
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Dirección se desliga
Por su parte, Bernal Zelaya, director del centro educativo, explicó que el dinero nunca estuvo en las arcas del colegio, sino en los bolsillos de la tesorera seleccionada por los propios padres.
“El dinero, ciertamente, no era del colegio, ellos la habían nombrado como tesorera del comité. Cuando el dinero entra a las arcas del colegio, entonces sí uno es responsable”, aclaró el maestro.
El director añadió que la encargada había respondido con dinero para gastos previos de la graduación, pero a la hora del desembolso final ya no pudo cumplir.
La mujer, de quien no se especificó el nombre, dio la cara ante los molestos padres y alumnos, asegurando que entregaría los fondos mañana jueves a las 2:00 p. m. Sin embargo, los padres ya no confían en su palabra.

La administración del centro educativo aceptó el lapso de tiempo, advirtiendo que, si la tesorera no cumple, tomarán acciones legales contra ella. También se había propuesto realizar la ceremonia el próximo cinco de diciembre, pero los padres aseguran que les están mintiendo.
Por el momento, autoridades y padres continúan en conversaciones para tratar de encontrar una solución que permita realizar la graduación. Sin embargo, ante la falta de confianza en la recuperación de los fondos, todo indica que la ceremonia podría no llevarse a cabo, dejando a los estudiantes sin la celebración que tanto esperaban.

