Redacción. Los Estados miembros de la Organización de los Estados Americanos (OEA) solicitaron formalmente al Gobierno de Honduras que los miembros del Consejo Nacional Electoral (CNE) y del Tribunal de Justicia Electoral (TJE) comparezcan ante el organismo internacional para abordar las preocupaciones relacionadas con el proceso electoral que se aproxima en el país.
En una carta dirigida al embajador de Chile y presidente del Consejo Permanente de la OEA, Tomás Ignacio Pascual Ricke, los firmantes expresaron su preocupación.
El escrito señaló que existen señales recientes que apuntan a riesgos crecientes para la autonomía de las instituciones electorales hondureñas.
Estos incluyen retrasos en los preparativos electorales y amenazas a funcionarios, poniendo en riesgo la integridad del proceso electoral de cara a las elecciones generales programadas para el 30 de noviembre.
El documento resaltó el apoyo firme y unánime de los Estados Unidos y los países cofirmantes a la Misión de Observación Electoral de la OEA en Honduras.
También, enfatizó que el CNE debe llevar a cabo sus funciones de manera independiente, sin interferencias ni presiones indebidas, en conformidad con la legislación hondureña.
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Solicitud
Los Estados miembros que suscriben la carta reiteran su compromiso con la defensa de las normas democráticas en Honduras, así como con el respaldo a la OEA y a su misión electoral.
Con ello, buscan garantizar que el pueblo hondureño pueda ejercer su derecho al voto libremente, de forma segura y conforme al calendario electoral establecido.
Además, instan a todas las autoridades hondureñas, incluyendo las electorales, judiciales y las Fuerzas Armadas, a respetar estrictamente el marco constitucional y legal del país.
Esto es fundamental para asegurar la protección y seguridad de los funcionarios electorales, un requisito indispensable para el ejercicio pleno de los derechos democráticos.
La OEA propuso que la sesión especial se celebre el próximo 25 de noviembre para tratar estos temas con el enfoque y la atención necesarios.
Esta solicitud se enmarca en un contexto regional de vigilancia y apoyo a procesos electorales transparentes y confiables. Además, reafirma la relevancia de la OEA como garante de la democracia en América Latina.
