La Ceiba, Honduras. La reciente liberación de Neris Acosta Martínez, de 37 años, detenido tras golpear con un palo a un guardia de seguridad en un supermercado de La Ceiba, ha provocado inquietud entre clientes y vecinos que presenciaron el hecho. Aunque la agresión fue captada en video y difundida en redes sociales, el Ministerio Público no pudo sostener un proceso judicial en su contra, lo que llevó a que recuperara su libertad en cuestión de horas.
Según la información oficial, varios elementos legales y médicos influyeron en la decisión. El primero es que el guardia no interpuso una denuncia formal ante la Fiscalía, un paso indispensable para iniciar una acusación. Sin este documento, el caso no puede avanzar, aun cuando exista evidencia audiovisual.
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Además, las autoridades confirmaron que el plazo de flagrancia ya había vencido cuando se intentó formalizar la acusación. Este período es el tiempo que la ley otorga para presentar un requerimiento fiscal después de una detención. Al no cumplirse dentro de lo establecido, la retención del sospechoso se volvió improcedente.
A estos factores se suma una valoración psiquiátrica, en la que especialistas determinaron que Acosta Martínez vive en condiciones de calle y presenta alteraciones mentales significativas. Su situación de indigencia y el deterioro de su salud mental pesaron en la decisión de no mantenerlo bajo arresto.
Respecto al guardia herido, la doctora Andrea Castillo informó en el noticiero Hoy Mismo de TSi que el hombre, de 54 años, ingresó al centro asistencial durante la madrugada del 13 de noviembre. Lo evaluaron especialistas en cirugía y otorrinolaringología, además de someterse a estudios cardiológicos previos a la intervención quirúrgica recomendada. A pesar de las lesiones que sufrió, su condición se reporta estable y fuera de peligro, un panorama alentador dadas las circunstancias del ataque.
