Redacción. El Consejo Nacional Electoral (CNE) llevó a cabo un simulacro nacional a gran escala, utilizando más de 520 centros educativos en los 18 departamentos del país.
Este ejercicio es fundamental en la recta final de la preparación con miras a las elecciones generales programadas para el 30 de noviembre.
El objetivo central del simulacro, según explicó Eduardo Fuentes, codirector electoral del CNE, es poner a prueba rigurosamente el sistema de transmisión de resultados preliminares y verificar la conectividad a nivel nacional.
La meta es ofrecer resultados transparentes e inmediatos la noche de los comicios. «Estamos construyendo un proceso electoral limpio, justo y a prueba de todo error», aseguró Fuentes a Radio HRN.
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Detección de fallas
El simulacro sirvió como un termómetro de la logística, permitiendo la detección temprana de anomalías reportadas por la ciudadanía. De igual manera, algunos informes señalaron la ausencia de custodios electorales o la presencia exclusiva de militares en ciertas ubicaciones.
Ante esto, el codirector Fuentes agradeció los reportes, indicando que el propósito del ejercicio es precisamente identificar y corregir estas fallas logísticas antes de la jornada electoral.
Del mismo modo, Lino Tomás Mendoza, codirector electoral de Organizaciones Políticas, corroboró que se registraron problemas técnicos y fallas en la asistencia y capacitación de los custodios.
Pruebas de conectividad
Un desafío crucial abordado en el ensayo fue la operatividad en áreas rurales. Fuentes detalló que aproximadamente el 50% de los centros participantes en el simulacro carecen de conectividad a internet o energía eléctrica. Esto permitió al CNE evaluar y validar mecanismos alternativos de comunicación para asegurar que ningún voto quede fuera del conteo.
El ejercicio se extendió desde las nueve de la mañana hasta las cinco de la tarde. Además, replicó todo el proceso logístico: desde el despacho de kits tecnológicos hasta la transmisión y escaneo de actas al sistema central.
El CNE se comprometió a documentar y subsanar cada irregularidad para garantizar que Honduras cuente con un proceso «abierto, plural y transparente».
