Redacción. Las autoridades del Hospital Escuela (HE) informaron que, en lo que va de 2025, se han atendido 113 personas por mordeduras de perro. La mayoría de los casos provienen del departamento de Francisco Morazán, especialmente de colonias y barrios de Tegucigalpa.
El tema cobra mayor relevancia tras la muerte, en agosto pasado, de una niña de cuatro años atacada por un perro en El Porvenir, un hecho que encendió las alarmas sanitarias en la capital.
Concepción Zúniga, quien forma parte del Departamento de Epidemiología del HE, explicó que cuando el perro agresor es desconocido, callejero o se ignora su esquema de vacunación, el paciente debe recibir tratamiento antirrábico de manera inmediata.
Entre los casos reportados, muchos corresponden a menores de edad, situación que preocupa tanto a las autoridades sanitarias como a la población.
El protocolo de atención incluye la limpieza profunda de la herida, la aplicación de antibióticos y, en los casos más graves, cirugías reconstructivas.
Zúniga instó a la ciudadanía a extremar precauciones y a vacunar a sus mascotas, con el fin de prevenir incidentes que puedan poner en riesgo la vida de los más vulnerables.
Los ataques de perros no se limitan a Tegucigalpa: en otras regiones de Honduras también se han registrado casos similares. Por ello, la cifra a nivel nacional podría ser superior, considerando que muchas personas no acuden a los centros asistenciales tras ser mordidas.

Cómo protegerse de un perro agresivo
Cada año, más de 4,5 millones de personas en Estados Unidos sufren mordeduras de perro, y más de 800.000 requieren atención médica, según la Asociación Americana de Medicina Veterinaria.
- Mantenga la calma y evite el contacto visual
No mire directamente al perro. Gire ligeramente el cuerpo, cruce los brazos sobre el pecho y permanezca inmóvil. No grite ni haga movimientos bruscos, ya que esto puede provocar al animal.
- Use tácticas de distracción
Si el perro se acerca, lance con calma un objeto o golosina lejos de usted para desviar su atención. Busque barreras como árboles o vehículos para mantener distancia.
- Protéjase durante un ataque
Si el perro arremete, cubra las zonas vulnerables con un bolso o chaqueta. Si cae al suelo, haga un ovillo, lleve las manos a la nuca y permanezca quieto y callado. Esto indica al perro que no representa una amenaza.
- No intente comunicarse con el perro
Evite hablar o gesticular; los perros responden más al lenguaje corporal que a las palabras. Menor interacción reduce el riesgo.
- Evite respuestas agresivas
No use spray de pimienta ni acciones agresivas antes de ser atacado. En caso de mordida, busque terreno elevado o use objetos para bloquear la visión del perro y escapar.
- Busque atención médica y denuncie el ataque
Si lo muerden, acuda inmediatamente a un centro de salud. Las mordeduras pueden causar infecciones graves, incluida la rabia.
Mantener la calma, usar estas estrategias y evitar agresiones aumenta las posibilidades de escapar sin lesiones.



