Redacción. El narcotraficante hondureño Juan Ramón Matta Ballesteros falleció en Estados Unidos mientras cumplía una sentencia de cadena perpetua por delitos de narcotráfico.
La noticia fue confirmada por el abogado de la familia, Marlon Duarte. El profesional del derecho lamentó que su muerte se produjera luego de intensas gestiones fallidas para lograr su liberación temprana por razones humanitarias.
Matta Ballesteros, de 80 años, padecía un avanzado cáncer de próstata. La familia había solicitado en reiteradas ocasiones su regreso para que pudiera pasar sus últimos días en Honduras. Duarte criticó duramente la inacción de las autoridades, tanto pasadas como presentes.
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«Ahí prácticamente fue sometido a torturas bajo conocimiento de autoridades anteriores y de estas también, que tuvieron la posibilidad de por lo menos contestar el teléfono», señaló Duarte en declaraciones a HCH, subrayando el dolor de la familia, que se encuentra «destrozada».
Repatriación
A pesar de su condena, el profesional del derecho enfatizó que Matta Ballesteros nunca dejó de ser hondureño. Por ello, la familia hace un llamado urgente a las autoridades para que faciliten la repatriación del cuerpo y se le pueda dar sepultura en su país. Hasta el momento, se desconoce si el traslado del cuerpo a Honduras será la decisión final de sus parientes.
Matta Ballesteros fue un narcotraficante pionero en el envío de cocaína a gran escala a través de Centroamérica, según InSightCrime. Las autoridades estadounideneses lo condenaron a cadena perpetua en 1990. Entre las acusaciones iniciales, los fiscales señalaron al hondureño como el responsable del asesinato del agente de la DEA, Enrique “Kiki” Camarena, ocurrido en 1985.
En mayo del 2025, Matta Ballesteros recibió una libertad humanitaria por salud. Sin embargo, un juez decisión revocar la autorización antes de que pudiera salir de prisión.
