Redacción. El 11 de octubre de 2025 se cumplieron ocho años desde la trágica muerte de Carlos Emilio Collier Núñez, un caso que estremeció a Honduras y que aún permanece vivo en la memoria colectiva. Su madre, Tatiana Núñez, compartió un conmovedor mensaje en redes sociales, recordando a su hijo con palabras llenas de amor, nostalgia y esperanza.
En la cuenta “Justicia para Carlos Emilio Collier Núñez”, Tatiana publicó un video que recopila momentos felices de Carlos: risas, viajes, reuniones familiares y escenas que reflejan la vitalidad del joven antes de su muerte. Mientras las imágenes se suceden, la madre narra un texto íntimo que transmite la ausencia, el dolor y la fe en un reencuentro más allá de la vida.
“La verdad, no estoy segura si el cielo o la vida después de la muerte existe. No sé si sabes cuando te pienso. No sé si sabes lo mucho que te extraño o si escuchas cada vez que te hablo. Pero voy a tomar el riesgo de hacerlo siempre…”, dice parte del mensaje compartido por Tatiana.
Ocho años de amor, memoria y justicia
En otro fragmento, la madre expresa su anhelo de reencontrarse con él algún día:
“Me gusta creer que en el futuro, cuando llegue el momento en el que yo también tenga que partir, me encuentre contigo y puedas responder a todas esas veces que te hablaba”, afirmó conmovida.
El video, acompañado por una suave melodía, muestra a Carlos en diferentes etapas de su vida: en la playa, entre amigos y junto a sus seres queridos. Cada imagen es un recordatorio del joven alegre y lleno de vida que Tatiana continúa honrando, no solo desde el amor, sino también desde su incansable búsqueda de justicia.
Durante estos ocho años, la madre de Carlos ha mantenido su voz firme ante los tribunales y en los medios, exigiendo que el caso no quede en el olvido. Su lucha ha trascendido las redes sociales, convirtiéndose en símbolo del dolor de muchas familias hondureñas que aún esperan respuestas.
El caso que marcó a Honduras
Carlos Emilio Collier, de 20 años, murió en octubre de 2017 tras haber salido con cinco amigos a una discoteca en Tegucigalpa. Días después, su cuerpo fue hallado en un basurero de la colonia Río Grande.
En noviembre de 2019, Carlos Alvarenga, conocido como “Susano”, fue condenado a 16 años de prisión por homicidio simple, tras ser identificado como el autor material del crimen. El tribunal también dictó cuatro años y seis meses de cárcel para James Alexander O’Connor, Olga María Ferrufino, Carlos Zamora y Elías Chaín, por su participación en el encubrimiento del asesinato.

Ocho años después, el recuerdo de Carlos sigue vivo, sostenido por la voz de una madre que no ha dejado de hablarle ni de exigir justicia.

