TEGUCIGALPA, HONDURAS. Un hombre, a quien aún no se identificó, estaba agonizando la mañana de este lunes frente a la posta policial ubicada en la colonia Loarque de la capital de Honduras.
Según la información recabada en el lugar, el individuo se acercó al recinto de seguridad; seguido, quedó viendo fijamente la edificación, desenfundó su arma, la dirigió a su cabeza y se disparó.
Pese a que se llamó al 911 para reportar su deceso, momentos después se identificó que no falleció de manera instantánea en el lugar, como pretendía; aún movía sus manos y piernas.
Por lo anterior, en una ambulancia un equipo de la Cruz Roja Hondureña se personó y constató que aún tenía signos vitales. Se le tomó la temperatura y también se comprobó que aún tenía una saturación -aunque baja- de oxígeno.
Después, el personal de asistencia le cubrió con una sábana anaranjada; además, le vendó su cabeza y le adaptó un tanque de oxígeno. De inmediato, se subió al hombre a la ambulancia para trasladarlo a la emergencia del Hospital Escuela (HE).
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Es importante decir que él es de contextura gruesa y, según el reporte, tendría entre 40 y 45 años de edad. Viste una camisa gris, un pantalón tipo jean azul y unos zapatos tipo «burros».
Cabe decir que los elementos de la Policía Nacional en la escena crearon un perímetro para evitar la intromisión de personas curiosas en el proceso de asistencia; además, otras fuerzas de seguridad llegaron a apoyar la tarea.
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