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viernes, abril 19, 2024

HISTORIA HUMANA: Raquel Aguilar, vende galletas para costear sus estudios

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¿Avena-pasas o chispas de chocolate? Esa decisión de ingredientes para una galleta, más el desembolso de L25, podría ser su significativa aportación para el cumplimiento de los sueños de una joven de 20 años.

También, podría tratarse de su inversión inicial hacia un futuro más saludable, tanto para usted, como para muchos hondureños. La protagonista de nuestra historia, tomó sus habilidades de cocina para costear sus estudios y perseguir sus sueños, que anhelan, algún día, forjar un nuevo concepto en la alimentación del país cinco estrellas.

Raquel Alejandra Aguilar nació en la capital de Honduras hace poco más de 20 años. Desde pequeña soñó en grande y, la ausencia de facilidades económicas, sumada a una indeseada cuarentena, no interpondrán una barrera en su búsqueda de convertirse en una versátil profesional en servicio de sus compatriotas.

Galletas, maquillaje y equipo médico: la estudiante de nutrición se ingeniará entre sus ventas para graduarse y especializarse en el extranjero.

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Una idea que el tiempo no cambió

Raquel sólo tenía ocho años cuando ya le preguntaban que qué quería ser cuando fuera grande. Ella cuenta que deseaba estudiar algo en el área de medicina, pero, se miraba también como dueña de un negocio.

«Desde esa edad quise y me plantee que iba a tener un restaurante. Hasta la fecha, esa es mi idea principal», contó la veinteañera.

En aquel entonces, sólo pensaba en la venta de comida, no se detenía mucho a pensar en qué tipo. Ahora, su restaurante soñado es uno que proporcione alimentos nutritivos, saludables y económicos. Estos últimos dos adjetivos sí pueden ir de la mano, asegura Raquel, aunque algunas personas no lo consideren así.

«La mayoría de los restaurantes que son saludables son caros. Yo quiero desmentir que los alimentos saludables y nutritivos tienen que ser costosos. Por el contrario, son fáciles de hacer y económicos», ilustró.

En marcha: Raquel se prepara para cumplir su objetivo

El paso de los años no cambió su parecer. Entró a la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) en Tegucigalpa y se decantó por la carrera de Nutrición; no podía ser de otra manera.

Según relata, ya está en el tercer año de su plan de estudios y, a pesar de que es una persona con múltiples quehaceres, es excelencia académica desde que inició sus estudios superiores en Ciudad Universitaria (CU).

Ahora bien, no bastará para ella que su camino académico le entregue una licenciatura. Aspira a una especialización en el extranjero.

«Me gustaría especializarme en el área de endocrinología o la agroindustria. Lo bueno de la nutrición es que te brinda un campo multifacético», dijo.

Pluralidad de ventas: sustento para un fondo académico

El propósito de culminar su carrera y la intención de continuar sus estudios en tierras foráneas, además de apoyar a sus padres ante algunos problemas económicos, la llevó a tomar una decisión que le traería algunos billetes a su bolsillo. Todo comenzó por idea de una amiga, inició con la venta de galletas.

«Comencé a vender galletas por influencia de una compañera» recordó inicialmente.

Y prosiguió relatando: «Yo siempre he llevado mis meriendas nutritivas a la universidad, entonces les doy a mis amigas de probar de lo que yo llevo porque me gusta recibir críticas para saber si voy bien o mal. Ella me preguntó que por qué no empezaba a vender galletas, ya que les gustaban. Así empecé».

Además de su negocio con las galletas, también se dedica a la venta de maquillaje y de equipo médico especializado. Para los artículos de belleza femenina, creó Fancy Nation, cuyo eslogan es «La nación que resalta tu belleza».

Para la adquisición de productos relacionados a la salud, inició la página Medi Todo Hn. Cabe destacar, que ambas tiendas en línea cuentan con la posibilidad de envíos nacionales. Raquel le busca una salida a todo.

Es más, en estos tiempos difíciles por el confinamiento domiciliario, la señorita aseguró que ha apoyado de manera monetaria a su familia debido a las repercusiones. Al principio de la cuarentena seguía vendiendo, pero por ahora sus transacciones están paralizadas, pues se ha quedado sin insumos.

Raquel
Sólo 25 lempiras cuestan las galletas de Raquel. Hay de avena-pasas y de chispas de chocolate. Además, ama la cocina y puede preparar muchísimos platos.

¿Ha sido fácil darse a conocer?

Con el tiempo, Raquel Aguilar ha logrado que su nombre resuene por varios rincones de la máxima casa de estudios. No obstante, desde un inicio, la situación no fue tan sencilla.

«No ha sido fácil vender. Por eso pedí apoyo a páginas famosas de la ‘u’ en Facebook para que me promocionaran. Además, personas en redes sociales, especialmente en Twitter, me han ayudado con la difusión y gracias a ello las personas me han buscado», narró.

Por otra parte, se enfrentó a otro tipo de problemas en sus ventas. También tiene que cumplir con sus compromisos académicos, por lo que llegaba a las 8:30 de la mañana al centro educativo para vender y se iba a las 9:00 a su primera clase. Sin embargo, muchas veces ha perdido ventas porque la gente quería pero no tenía dinero o no andaban cambio.

«Es difícil porque la mayoría de alumnos de Nutrición llevan su propia comida», agregó. Incluso, contó que una vez tuvo que regresarse con un par de galletas a su hogar.

Un obstáculo más que atraviesa habitualmente es la organización de su tiempo. Sus clases más la venta de tres negocios no es cosa fácil.

«Las malas vibras me empoderan» 

Aguilar asegura que, como consecuencia del éxito en sus páginas y con las galletas, han llegado malos comentarios e inventos por parte de las personas para desmeritar su esfuerzo.

«Han inventado cosas de mis productos y han querido humillarme en las redes. Cuando a uno lo critican es porque está haciendo algo bien; las malas vibras me empoderan. Siento que soy capaz de hacer las cosas que mis críticos no pueden», expresó con firmeza.

Por el mismo lado, detalló que sus detractores decían que sus galletas «no eran saludables» y que contenían «azúcares refinadas». Además, atribuían su necesidad de dinero a que está «enferma» o «embarazada». No les da mayor importancia a las palabras vacías.

Healthy Nutri Tips

La joven estudiante tiene una agenda apretada. Hasta para charlar con Diario TIEMPO Digital tuvo que hacer un espacio en sus asignaciones. Algo a lo que le dedica un compás de tiempo diario es a una página nutricional que abrió en Facebook: Healthy Nutri Tips.

En esa plataforma le han preguntado de dónde son las galletas y ella, con orgullo, contesta que son del corazón de Centroamérica. Ese espacio no tiene un fin lucrativo. Ella dilucida el por qué de su página.

«La creé porque los conocimientos que voy adquiriendo diariamente son muchos y nunca lograré dárselos todos a un paciente, compañeró, familiar o amigo; son demasiados. Quiero aportar con detalles en las redes, que son de mucho impacto hoy en día», explicó.

«Ayudo así a muchas personas; de hecho me han preguntado que si tengo clínica, que si doy consultas y me llena de orgullo propio porque sé que muchas personas contarán conmigo cuando sea una egresada profesional», añadió.

Incluso, especificó que, cuando no tiene la respuesta precisa para una persona, les remite a otros profesionales que son de su confianza. Raquel siempre busca ayudar, aunque no tenga siempre a mano cómo.

Servir para vivir

Todo lo que nos compartió previamente la futura nutricionista nos da un pauta de cómo es ella. Pero, ¿qué opina ella de sí misma? ¿Cómo se describe?

«Me describo como una persona muy servicial. Realizo muchas cosas sin esperar nada a cambio y siempre estoy ahí para los demás», detalló.

Como ejemplo de lo anterior, mencionó que en su carrera es difícil conseguir libros y adquirir materiales. Por lo que, ha creado grupos en Facebook y Whatsapp para que, quienes no pueden acceder a comprar las piezas literarias, las puedan tener a su alcance de manera digital.

Por otra parte, también considera que tiene un liderazgo importante y es perfeccionista. Al momento de tomar decisiones, asegura que siempre se pone en los zapatos de los demás si es una decisión colectiva. Si es una determinación personal dice: «pienso en que, cuan más difíciles sean las cosas, mejor será el resultado», o sea no le teme a los retos.

Relacionado con sus anhelos de vida, desveló que le fascina cocinar, pero también dedica tiempo a leer e investigar. Ojalá que después de conocer más de Raquel tome a bien elegir qué galleta le gustaría, pues, cooperará con el sueño de una dulce y servicial joven que quiere hacer cosas grandes en su país. Seguro que lo logrará y TIEMPO estará ahí para contarlo.


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