ATLÁNTIDA, HONDURAS. La Policía Nacional (PN) desarrolló una requisa en el centro penitenciario ubicado en el barrio Inglés de La Ceiba, donde encontró celulares, droga y objetos cortopunzantes.
En esta acción participaron funcionarios de la Dirección Nacional de Prevención y Seguridad Comunitaria (DNPSC), así como la Dirección Policial de Investigaciones (DPI).
Le puede interesar- Capturan agente que intentaba ingresar droga a penal en Olanchito
También, acompañaron elementos de la Dirección Policial Anti Maras y Pandillas Contra el Crimen Organizado (DIPAMPCO) y Dirección Nacional de Vialidad y Transporte (DNVT).
Como resultado de esta acción las autoridades encontraron varias armas cortopunzantes que estaban en poder de los presos, como tijeras, limas, alambres y cucharas con puntas.
También, hallaron 13 teléfonos celulares, 311 envoltorios de papel supuesta marihuana, 3 bolsas medianas de supuesta droga y 30 envoltorios de supuesta droga crack.
Igualmente, localizaron siete puntas de cocaína, 1 router, 5 cuchillos, 6 cargadores de celulares y una pipa artesanal.
Todos estos objetos estaban ocultos debajo de colchones y en medio de otros artículos. Las evidencias las ubicaron mediante un registro minucioso que realizaron en las celdas #18, #19, #27 y #29.
Según las autoridades policiales la tenencia de estos artículos puede desencadenar una serie de inconvenientes al interior de los centros penales.
Todas estas evidencias las retiraron y trasladaron a la bodega de la Policía Nacional.
Droga, celulares y electrodomésticos hallan en cárcel de Olanchito
El pasado 18 de junio, las autoridades del Instituto Nacional Penitenciario (INP) informaron sobre el hallazgo de droga, celulares y varios objetos en el centro penal de Olanchito, departamento de Yoro.
De acuerdo con el informe, los objetos estaban ocultos en caletas dentro de pedazos de madera de sus camas o repisas artesanales para adaptarlos como compartimentos falsos.
Iniciaron inspeccionando los dormitorios y luego desmontaron las repisas artesanales. Por lo tanto, descubrieron que los trozos de madera los ahuecaron para introducir teléfonos celulares y droga.
En ese sentido, detallaron que algunas partes de las camas también habían sido adulteradas, es decir ahuecadas para ocultar en ellas objetos y sustancias de uso prohibido para las personas privadas de libertad.