Redacción. Una cámara submarina que se usó en el año 1970 para captar en imágenes el «monstruo» del Lago Ness en Escocia, Reino Unido, se recuperó de manera accidental en los últimos días y cuenta con fotografías sorprendentes.
Adrian Shine, encargado del proyecto Lago Ness, que ha estado buscando a Nessie desde la década de 1970, indicó a la BBC que, «es notable que la carcasa haya mantenido la cámara seca durante los últimos 55 años».
El dispositivo localizado, que muestra el paso del tiempo, es una de las seis cámaras que el biólogo de Chicago y encargado de la Oficina de Investigación del Lago Ness, Roy Mackal, envió al lago en 1970.
Quienes encontraron la cámara esperaban obtener imágenes definitivas del legendario crípido (monstruo) que ha generado miles de supuestos avistamientos. Entre ellos, uno «particularmente cautivador», luego de que notaran una masa resbaladiza en el lago.
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Historia detrás de la cámara
Esta cámara estuvo en el olvido por más de medio siglo, hasta que la encontró un sumergible marino autónomo. El dispositivo conocido como Boaty McBoatface opera el Centro Nacional de Oceanografía (NOC) del Reino Unido.
Durante una exploración en las profundidades del Lago Ness, McBoatface logró enganchar inadvertidamente el amarre de la cámara monstruosa, a casi 600 pies.
Adrian Shine afirmó estar impresionado por la «ingeniosa cámara trampa», equipada con un cubo de flash, para así poder tomar cuatro fotografías cuando se tomaba el sedal, quizás por «el monstruo».
Asimismo contó que le sorprendió el hecho de que una cámara tan compleja pudiese permanecer seca en su carcasa por más de 50 años, y lo más importante, que permitiera utilizar una película adecuada al abrirla.
Sorpresa
A pesar del sorprendente hallazgo, se confirmó que la cámara no capturó ninguna imagen de «Nessie». Pero, algunas fotos que se revelaron proporcionaron un mapa visual impresionante de las profundidades del lago.
La película y la cámara se entregaron ya al Centro Loch Ness, en Drumnadrochit, cerca de donde la recuperaron. En consecuencia, hasta ahora la existencia de Nessie sigue siendo tan turbia como las aguas en las que supuestamente reside.