Redacción. Una tripulación de la Guardia Costera de los Estados Unidos (EE.UU.) dio un fuerte golpe al narcotráfico, luego de incautar miles de kilos de presunta cocaína en el Pacífico Oriental.
De acuerdo con el reporte oficial, los guardacostas descargaron al menos 5 mil kilos, con 11 mil 992 libras de cocaína, valoradas en unos 88.2 millones de dólares, precisamente en Port Everglades, Florida.
Para poder decomisar este cargamento de drogas, la Guardia Costera realizó tres interdicciones separadas en el Pacífico Oriental. En las operaciones participaron elementos del Equipo Táctico de Aplicación de la Ley Área del Pacífico y la tripulación embarcada del Escuadrón Táctico de Interdicción de Helicópteros.
«El profesionalismo y la cohesión de nuestro equipo a bordo fueron los principales factores que contribuyeron a nuestros éxitos operativos”, declaró la suboficial de tercera clase Nadia Sands, especialista en operaciones del Centro de Información de Combate del guardacostas.
Asimismo, expresó que la tripulación y el mando encarnan el espíritu de un verdadero equipo, y que ese mismo espíritu los seguirá impulsando a alcanzar sus objetivos. Del mismo modo, señaló que su misión incluye proteger las fronteras de Estados Unidos y combatir a los actores criminales transnacionales.
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Una operación conjunta
Asimismo, la Guardia Costera indicó que los activos y tripulaciones involucrados en estas operaciones antidrogas fueron:
- Buque de la Guardia Costera de EE. UU. Escanaba (WMEC 907)
- Escuadrón Táctico de Interdicción de Helicópteros de la Guardia Costera de EE. UU.
- Equipo táctico de aplicación de la ley del área del Pacífico de la Guardia Costera de EE. UU.
- Fuerza de Tarea Conjunta Interinstitucional Sur (JIATF-Sur)
- Personal del Distrito de la Guardia Costera del Suroeste
Las autoridades recalcaron que detectar e interceptar droga y narcotraficantes en alta mar requiere de una coordinación significativa. Es por ello que se emplean tácticas aéreas, marítimas y terrestres.
«Cuando una interceptación es inminente, comienza la fase policial de la operación, y el control de la misma recae en la Guardia Costera de los Estados Unidos para las fases de interceptación y aprehensión», detallaron.
