HONDURAS.- Hace diez años, Honduras soñaba con el regreso a un Mundial adulto, ya que su última participación fue en el Campeonato Mundial de España 1982, convirtiéndose en un anhelo del pueblo catracho cantar el himno nacional en suelos mundialistas.
La misión era Sudáfrica 2010, la «H» dirigida en ese tiempo por Reinaldo Rueda realizó una eliminatoria de ensueño, sin embargo la clasificación no dependía de Honduras ese 14 de octubre del 2009, los catrachos enfrentaban a El Salvador en el estadio Cuscatlan y para clasificar tenían que pasar dos cosas; la primera era sacar una victoria en el «coloso salvadoreño»; la segunda que Estados Unidos le ganara a Costa Rica algo que dentro de los papeles era lo más probable, pero el fútbol da sorpresas.
El drama de la clasificación
En el primer tiempo y en suelo estadounidense, Costa Rica se iba adelante al minuto 20 del primer tiempo por medio de Brayan Ruiz y solo tres minutos después, el mismo Ruiz le daba la victoria a los costarricenses por 2-0, Tim Howard (arquero de EE.UU) solo miraba el balón pasar y la esperanza de la «bicolor» desaparecía en cada minuto que transcurría en el cronómetro.
En San Salvador, Honduras fue dominante en la primera mitad, pero la falta de definición no permitía que los catrachos tomaran la delantera, El Salvador en los últimos 15 minutos dio indicios de saber la lectura del juego hondureño.
Volviendo al RFK Stadium de Washington en su segunda mitad, los norteamericanos intentaron abrir espacios en Costa Rica que se cerraba en procura de sostener la diferencia; pero la resistencia tica duró hasta los 71 cuando, Keylor Navas no pudo atajar un remate de Michael Bradley, quien rescató el balón para anotar el primero de los anfitriones.
El gol reanimó a Estados Unidos, que se fue adelante presionando a los ticos en procura del empate. A los 83 y cuando arreciaba el ataque estadounidense, el zaguero Oguchi Onyewu cayó lesionado al intentar un salto, dejando a su equipo con 10 hombres.
De regreso al Cuscatlan, los salvadoreños llevaron la iniciativa disparando desde todos ángulos obligando al portero hondureño Noel Valladares a sendas estiradas para tapar todos los espacios.
Pero a los 63 minutos, Pavón aprovechó un centro de David Suazo desde la derecha y con un certero frentazo estremeció la portería salvadoreña e hizo saltar de júbilo a unos 5.000 hondureños que asistieron al estadio Cuscatlán, de momento no estábamos clasificados.
La consagración de Bornstein
Era el último minuto después de cinco que el árbitro había agregado, un tiro libre y una tan sola chance para que los Estados Unidos pudieran empatar, el encargado de ejecutar fue Landon Donovan, tras el centro y en una confusa jugada en el área chica de Navas, con prácticamente todos los jugadores metidos en la zona, Jonathan Bornstein recibió el centro y de cabeza enterró las ambiciones de Costa Rica, Honduras estaba en el mundial de Sudáfrica.
La fiesta en el Cuscatlan
El partido en San Salvador había terminado con victoria 1-0 a favor de los catrachos, en ese momento los jugadores de Honduras no sabían del empate entre Estados Unidos y Costa Rica.
La locura comenzó cuando el periodista hondureño, Salvador Nasralla confirmó el empate y la algarabía de los catrachos en suelos salvadoreños fue notable, HONDURAS ESTABA EN SUDÁFRICA 2010.
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