Redacción. La Fundación para el Niño Quemado (Fundaniquem) tiene disponible sólo cinco cupos antes de alcanzar su capacidad máxima de atención.
Alfredo Ortiz, portavoz de la institución, comentó a Diario Tiempo que, al domingo 22 de diciembre, tienen 18 menores ingresados. De estos, el 92 % resultaron con quemaduras por líquidos calientes.
El vocero de Fundaniquem destacó que esa sala tiene capacidad para atender únicamente a 23 menores, por lo que invitan a la población hondureña a mantener vigilancia sobre los menores durante esta época del año.
Además, Ortiz reveló que tres pacientes regresaron a sus hogares debido a que recibieron manejo ambulatorio para sus lesiones. En este sentido, detalló que muchos de los accidentes han estado vinculados, en su mayoría, a la cocción de nacatamales.
De acuerdo con las autoridades de Fundaniquem, las edades de los afectados oscilan entre 0 y 10 años, y provienen de los departamentos de Francisco Morazán, Comayagua y Olancho.
«Es una emergencia por líquidos calientes lo que estamos viviendo. El año pasado fue lo contrario, eran más por pólvora», aseguró Ortiz a Diario Tiempo.
Consecuencias de la pólvora
Diario Tiempo contactó al médico hondureño Carlos Umaña para hablar sobre las consecuencias que conlleva el uso de la pirotecnia, además de cuál es el impacto en la salud respiratoria de las personas.
«Desafortunadamente, la cultura del pueblo hondureño fomenta el uso de la pólvora. El problema es que los niños quemados comenzaron antes de las fechas», comentó Umaña, destacando que ya se han reportado diversos ingresos en la Fundación para el Niño Quemado (Fundaniquem).
Umaña también afirmó que las personas con problemas de asma, bronquitis crónica, rinitis alérgica y los hiperreactores bronquiales deben tomar más precauciones durante el 24 y 25 de diciembre (Navidad) y, de igual manera, el 31 de diciembre y 1 de enero (Año Nuevo).