TEGUCIGALPA.-“La reelección presidencial es un proceso legal e irreversible y nuestra posición es que debe de regularse a través del Congreso Nacional por un período continuo”, definió así el presidente de la Asociación de Municipios de Honduras (AMHON), Fredy Cerrato, su posición sobre este polémico tema electoral y político de Honduras.
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“Los alcaldes no podemos estar en contra de la reelección por cuanto es un axioma ya que nosotros somos fruto de ella, ya que sería un doble discurso que nosotros no hablemos sobre el tema. Creemos en la continuidad de los procesos y en la medida de que un alcalde reelecto hace las cosas bien entonces sería una antítesis que dijéramos lo contrario”, justificó Cerrato, un dirigente que casi siempre está de acuerdo con las políticas del actual gobierno.
Fredy Cerrato señala la ruta
Finalmente indicó que “si el Congreso Nacional es el foro por excelencia de los políticos aquí se tiene que discernir y orientar en el tema de la Ley Electoral y como hace mucho tiempo que se viene hablando de ese tema y como ya no es prohibido hablar de la reelección, nosotros nos pronunciamos porque las dos terceras partes procedan a la reforma electoral por adhesión y se regule la reelección presidencial”.
Antecedentes
La Reelección Presidencial en Honduras, cuyo debate hasta el lunes pasado giraba en torno a su legalidad, ha copado la agenda de los políticos y los medios de comunicación en los últimos días y se mostró como una realidad en medio de la ilegalidad.
Los parciales del actual gobernante han defendido la posibilidad de que quien haya ocupado la titularidad del Poder Ejecutivo pueden repetir en el cargo, aunque muy pocos se han atrevido a decir que hablan en beneficio de una candidatura de Juan Orlando Hernández Alvarado.
La oposición, por su ladao, se había enfrascado en discusiones alrededor del fallo judicial que reformó el artículo constitucional que penalizaba siquiera hablar del tema, una resolución que calificaban de ilegal y que rechazaban acudiendo a la Corte Suprema de Justicia (CSJ) con recursos de oposición que fueron desestimados.
Al comienzo de la semana anterior, un grupo de líderes de los partidos de oposición se habían reunido para confirmar una alianza en contra de la reelección presidencial. A la cita se hizo presente Salvador Nasralla, máxima figura del Partido Anticorrupción (PAC), Mauricio Villeda, presidente del Partido Liberal y Guillermo Valle, titular del Partido Innovación y Unidad (PINU).
El gran ausente en esa reunión fue el coordinador de LIBRE, José Manuel Zelaya. Representó a ese partido político el diputado Rassel Tomé, quien en los últimos meses ha adversado abiertamente a Zelaya y ha mostrado clara oposición a la reelección.
Pero la chispa que avivó las llamas reeleccionistas fue un comunicado de la Comisión Política de LIBRE, que en horas de la madrugada del martes decidía anunciar su decisión de consultar a sus simpatizantes, en las elecciones primarias de octubre, si están de acuerdo con que Zelaya Rosales se inscriba como candidato presidencial en caso que lo haga Juan Orlando.
Del lado nacionalista, nadie criticó la decisión de LIBRE. El miércoles, el vicepresidente del Congreso Nacional, Antonio Rivera Callejas decía más bien que quienes se oponen a la reelección quieren coartar las aspiraciones políticas que por derecho propio tienen los ex presidentes. Una señal bien clara cuál es la ruta.
Los partidos LIBRE, Nacional y Liberal han comenzado a recoger firmas para que a través de una Iniciativa Ciudadana se legalice la Reelección en Honduras, aunque la Constitución no la permita, según otros actores de la política de Honduras.
