Redacción. Rodeados por los daños dejados por los huracanes Helene y Milton, los habitantes de Florida se enfrentan a la ingente tarea de limpiar, pero muchos carecen de electricidad y combustible para hacerlo.
Con las carreteras bloqueadas por los árboles caídos y las inundaciones, los proveedores de combustible y las compañías eléctricas están trabajando para volver a poner en marcha la infraestructura de la vida cotidiana. La policía está ayudando en los esfuerzos de recuperación escoltando a los camiones cisterna de combustible que intentan llegar a los más necesitados.
El presidente Joe Biden visitará Florida para evaluar los daños causados por la tormenta, según anunció la Casa Blanca. Hará un recorrido aéreo para ver algunas de las zonas más dañadas, se reunirá con los socorristas y hablará en San Petersburgo el domingo por la mañana.
Las gasolineras siguen esperando combustible
Algo menos del 30 % de las gasolineras del estado carecían de combustible a primera hora de este domingo, según el sitio web de seguimiento GasBuddy.com. En la zona más afectada, Tampa-San Petersburgo, más de tres cuartas partes de las gasolineras, el 77 %, no tienen combustible.
En la zona de Sarasota, el 62 %. Asimismo, en la zona de Ft. Myers y Naples, el 42 %, y en la de Orlando, el 35 %. En los puertos de Florida se descargaron más de 37,3 millones de galones de combustible, según Kevin Guthrie, director de la División de Gestión de Emergencias del estado.
«Tenemos en este momento 25 escoltas de la Patrulla de Carreteras de la Florida para apresurar los camiones cisterna de combustible desde el puerto, por lo que se están trayendo para llenar las estaciones», dijo el gobernador Ron DeSantis.
Tres sitios públicos de combustible en Plant City, Bradenton y St. Petersburg se han abierto, donde los clientes pueden recibir 10 galones de gas cada uno de forma gratuita. El gobernador dijo que se abrirán más este domingo en los condados de Charlotte, Pinellas y Hillsborough.
El suministro eléctrico se está restableciendo gradualmente
En las primeras horas del domingo, poco más de un millón de personas seguían sin electricidad en todo el estado, frente a un pico de casi 3 millones. Equipos de todo el país están trabajando para volver a conectar hogares y empresas a la red. Las compañías eléctricas calculan que la mayoría de la gente tendrá electricidad a mediados de semana.