Redacción. La hermana del pastor Levis Joel Figueroa, víctima del trágico accidente de un autobús y una rastra en la cuesta Los Hornos, Copán, denunció al hospital Mario Catarino Rivas por presunta negligencia médica y maltrato.
El pastor Figueroa se dirigía a una reunión de líderes en Cucuyagua cuando, durante el trayecto en el bus en el que se trasladaba, sufrió severas lesiones. Según informaron sus familiares, él se dedicaba a la construcción y falleció ayer a las siete de la noche en el hospital.
La hermana de la víctima denunció maltrato hacia ella y el paciente: «Yo miraba el trato que tenían ellos hacia mi hermano, incluso yo les decía ‘mi hermano está sufriendo, hay que levantarlo porque dice que no aguanta el lomo'». La respuesta que recibía, según ella, era despectiva: «Ay, déjelo señora».
Seguridad
Además, la hermana denunció el trato recibido por parte de los miembros de seguridad del centro asistencial. «Una guardia de seguridad que me trató como una perra, yo no soy una perra, yo soy un ser humano».
Uno de los puntos más críticos de la denuncia familiar es la intubación del paciente sin consentimiento: «Lo intubaron sin el permiso mío y el de la esposa, porque él estaba casado», apuntó la mujer.
Asimismo, relató que lo mantenían con los pies «guindados en la camilla» y necesitaba ser operado del brazo para poder sentarse.
Ayuda
El cuñado de la víctima, identificado como Gaspar, corroboró que el pastor Levis Joel Figueroa estaba consciente y pedía ayuda: «Él estaba consciente y cuando queríamos tratar de ayudarlo, nos decían ‘sálgase para afuera porque nosotros somos los médicos, vamos a hacer todo por él’ y eran puras mentiras».
La familia asegura que el pastor estaba «demasiado hostigado», quería quitarse las sondas y, aunque ellos intentaban asistirlo, los guardias no lo permitían.

El cuñado reiteró su convicción sobre la negligencia, afirmando que el hospital «en vez de ayudar a los pacientes los matan, porque lo entubaron sin consentimiento de familiares».
Según la hermana del pastor, la intubación fue una medida para silenciarlo: «Lo intubaron y él estaba consciente, lo hicieron para callarlo, para que no hablara, porque él decía ‘ayúdenme’ y dijeron ellos ‘solo entubado se puede quedar tranquilo, anestesiémoslo para que se duerma'».
Versión del hospital
El doctor Gabriel Paredes, director del Hospital Mario Catarino Rivas, refutó la denuncia de negligencia médica. Explicó a Diario Tiempo que el paciente llegó en un estado de salud crítico: «El paciente llegó grave con múltiples fracturas de huesos largos, trauma craneoencefálico moderado y una rabdomiólisis severa».
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Según el director, el pastor Figueroa fue el paciente «más delicado» en ese momento, ingresando en «estado crítico». Aseguró que se intentó estabilizarlo sin éxito, lo que impidió llevarlo a quirófano. «No se logró estabilizar, por tanto, no se podía meter a quirófano porque así inestable hubiera fallecido».
Emergencia
El doctor Paredes explicó que la intubación fue una medida de emergencia para salvar la vida del paciente. «La lucha por estabilizarlo culminó por intubarlo porque presentó una falla ventilatoria». Añadió que se intubó para «darle soporte ventilatorio y evitar que fallezca de inmediato, para salvarle la vida».
Respecto a la falta de autorización, el director señaló la urgencia de la situación: «Ellos hablan de que no pidieron autorización para entubarlo, pero el problema es que para entubar un paciente la decisión debe de ser en segundos».
«Son situaciones médicas que muchas veces es complicado que los familiares lo entiendan o de repente la transmisión de la información entre el recurso humano que está atendiendo el paciente y el familiar no es la mejor. Eso lo reconocemos como falencias del sistema», explicó.

Paredes indicó que el fallecimiento del paciente se debió a la gravedad de su condición. «El paciente al final fallece porque la falla ventilatoria fue severa y lo conllevó a una falla multiorgánica y cardíaca. Quisimos salvarle la vida, pero no se pudo, la severidad del cuadro era mucha».
Malos tratos
Aunque el hospital no ha encontrado errores en los procedimientos médicos, el director Gabriel Paredes se comprometió a investigar las denuncias de malos tratos. «Hay situaciones que sí las vamos a asumir como hospital e investigar, (por ejemplo) el tema de los malos tratos por el peso respectivo del paciente o las situaciones con los guardias».
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Finalmente, el director explicó que en ciertas situaciones, como procedimientos de reanimación o limpieza de pacientes, la presencia de familiares puede no ser permitida.