TEGUCIGALPA, HONDURAS. Autoridades del Instituto Nacional Penitenciario (INP), descartaron que tres privados de libertad que fallecieron ayer miércoles hayan perecido a causa del Covid-19.
Los tres sujetos se encontraban internos en la Penitenciaria Nacional Marco Aurelio Soto. Misma que se encuentra ubicada en la aldea de Támara, Distrito Central, al norte de la capital.
De momento, en este centro de reclusión no se registran fallecimientos por Covid-19. Sin embargo, si hay presos que dieron positivo a las pruebas y, a estos, se les está dando la atención adecuada, dijo la portavoz del INP, Digna Aguilar.
En un principio se había filtrado la información de que efectivamente estas muertes habían sido a causa del coronavirus, la vocera desmintió dicha versión.
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Privados de libertad fallecen por causas ajenas al Covid-19
El primero de los privados de libertad fallecidos se encontraba hace una semana interno en el Hospital Escuela por un problema de hipertensión arterial. Fue remitido al Tórax, donde falleció ayer miércoles.
El segundo caso se trata de un privado de libertad de 58 años que fue atendido por el personal médico del centro penitenciario. Presentaba complicaciones respiratorias y fue llevado al Hospital Escuela, donde entró con un cuadro de paro cardíaco y falleció.
Mientras que el martes a las 11:00 de la noche se registró la tercera muerte en la clínica instalada en el interior de la cárcel; se trata de un reo que padecía de asma, identificado como Germán Laínez Valladares, de 44 años.
Aunque las tres muertes parecieran de personas que evidentemente se verían drásticamente afectadas en caso de que hubiesen sido positivos por Covid-19, las autoridades del INP se mantienen en su postura y aseguran que los tres eran negativos al Coronavirus.
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