Redacción. Pippo Baudo, uno de los presentadores más famosos e importantes de la historia de la televisión italiana, figura clave de la cultura popular del país a partir de los años 60, participando en los programas más destacados y presentando trece ediciones del Festival de San Remo, falleció en las últimas horas en Roma a los 89 años.
Todos los medios italianos destacaron a Baudo y le dedicaron el domingo un espacio importante, señalando que «hizo historia en la televisión» y subrayando que su larga carrera lo convirtió en el presentador italiano más famoso, influyente y querido de todos los tiempos.
Recordado por su carácter jovial y por impulsar las carreras de comediantes, cantantes y presentadores, presentó programas históricos de la RAI, como Canzonissima, Domenica In y Fantastico.
Originario de la provincia de Catania, en Sicilia, Baudo trabajó en emisiones de radio y televisión de la RAI. Al mismo tiempo, organizó festivales de música locales, como el Festival de la Canción de Vibo Valentia, el Festival de Nápoles y Canta Italia.
Se presentó por primera vez como presentador en el Festival de San Remo en 1968 y, desde entonces, se convirtió en un rostro familiar para millones de personas. En los años siguientes, la organización del festival le encargó dirigir doce ediciones más, ejerciendo a menudo también como director artístico.
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Influencia en la cultura pop de los 80
En la década de 1980, Baudo se centró principalmente en presentar programas como Domenica In y Fantastico, en los que dio espacio a artistas y comediantes que se convirtieron en referentes de la cultura pop de esa época. Entre ellos: Lorella Cuccarini, Roberto Benigni, Fiorello y Beppe Grillo.
A lo largo de su carrera, también descubrió y promovió talentos. Gracias a su influencia en la organización del Festival de San Remo, ayudó a dar a conocer al público general a artistas. Entre ellos: Al Bano, Massimo Ranieri, Anna Oxa, Eros Ramazzotti, Andrea Bocelli y Laura Pausini, entre otros.
El presidente italiano, Sergio Mattarella, recordó «la profesionalidad, la cultura, la gracia y la extraordinaria capacidad de Baudo para interpretar los gustos y expectativas de los televidentes italianos».
Por su parte, la primera ministra Giorgia Meloni escribió en X: «Nos ha dejado uno de los grandes protagonistas de la historia de la televisión italiana. Su rostro y su voz acompañaron a generaciones enteras, regalando emociones, sonrisas y momentos inolvidables».
Los dirigentes de la RAI afirmaron: «Con Pippo Baudo se va una parte fundamental de la televisión, se va una parte fundamental de la Rai. Sin embargo, él y su legado permanecerán grabados en el patrimonio cultural de Italia».
Todo el mundo de la televisión y del espectáculo en Italia despidió al presentador. Su exesposa, la soprano Katia Ricciarelli, también se sumó a las condolencias y destacó: «Fue el mejor de todos».
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