REDACCIÓN. Las autoridades de la Patrulla Fronteriza han recibido instrucciones de extremar los controles para evitar que Francisco Oropesa intente huir hacia México, luego de haber matado a cinco hondureños, aseguró una fuente policial citada por CNN.
Más de 250 agentes están asignados a la búsqueda, pero las autoridades han admitido que, hasta ahora, cuentan con pocas pistas que les conduzcan al paradero de Oropesa, de 38 años y nacionalidad mexicana.
Lea también – Ofrecen $80,000 de recompensa por información de Oropesa
Este lunes las autoridades difundieron nuevas imágenes en las que se muestran varios de los tatuajes del sospechoso. En el cartel se reitera la advertencia de que está «armado y es peligroso».
A la tragedia de Cleveland se sumó una polémica provocada por el gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, por una controversial declaración en el que, al reaccionar a la masacre, subrayó el estatus migratorio de las víctimas.
¿Por qué ocurrió el tiroteo en Cleveland, Texas?
Las autoridades han identificado a Francisco Oropesa, de 38 años, como el principal sospechoso de la masacre que mató a cinco miembros de una familia vecina después de que le pidieran que dejara de disparar su arma puesto que un bebé intentaba dormir.
Oropesa se movilizó a la casa de sus vecinos armado con un AR-15, un rifle semiautomático capaz de disparar más de 45 balas por minuto, y mató a cinco de los miembros de una familia de origen hondureño.
A ellos los identificaron como Sonia Argentina Guzmán, de 25 años; Diana Velásquez Alvarado, de 21; Obdulia Molina Rivera, de 31 y José Jonathan Cáceres, de 18.
Al niño Daniel Enrique Lazo, de nueve años, lo trasladaron a un hospital pero murió a causa de sus heridas poco después.
Wilson García, quien perdió a su esposa Diana y a su hijo Daniel en la masacre, relató que un bebé sobrevivió porque lo ocultaron con ropa para que no lo mataran. Dos de las mujeres murieron protegiendo a los niños.