CORTÉS, HONDURAS. José Adalid Amaya Argueta, de 49 años de edad, fue trasladado la mañana de este miércoles de San Pedro Sula hacia la capital. Lo anterior, tras ser capturado en el sector de El Florido, departamento de Copán.
Fue remitido esta madrugada desde el occidente del país hacia la sede regional de la Fuerza de Seguridad Interinstitucional Nacional (FUSINA) en el norte del país.
Vía aérea, José Adalid fue llevado a una celda del Primer Batallón de Infantería. Esto, en la capital, para luego ser presentado ante un juez; es decir, en el máximo Tribunal de Justicia para el debido proceso.
«En estos momentos se están complementando las instancias administrativas para que sea trasladado por los delitos que la justicia norteamericana le imputa. Por cuestiones de seguridad no daremos los lugares exactos donde permanecerá por ahora», mencionó este día el portavoz de las Fuerzas Armadas de Honduras, José Domingo Meza.
LLEVADO BAJO FUERTES MEDIDAS DE SEGURIDAD
Amaya Argueta era buscado por las autoridades de Honduras y Guatemala. Así como por Estados Unidos, como objetivo de alto valor estratégico por el tráfico de drogas. La captura se produjo en el barrio Buenos Aires, de la aldea El Porvenir.
El detenido tiene cargos por conspirar para transportar cinco kilogramos o más
de cocaína. Por el mismo delito, Honduras ya ha extraditado hacia Estados Unidos a dos
hermanos del detenido. Uno de ellos fue identificado como José Raúl Amaya Argueta y Marlene Amaya Argueta, esposa de José Inocente Valle Valle.
Hasta hoy, la justicia estadounidense ha condenado a nueve miembros del cartel de los Valle Valle, incluyendo a sus principales cabecillas; es decir, a los hermanos Miguel Arnulfo y Luis Alonso.
El cartel de los Valle Valle tenía su centro de operaciones en el departamento de Copán y las investigaciones indican que eran aliados del mexicano Joaquín “El Chapo” Guzmán, que está siendo enjuiciado en Nueva York.
En 2014, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos añadió al clan Valle a su lista de capos (kingpin list). Además, dejando a la organización frente a un futuro incierto.
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